El papa Francisco destacó la preocupación de este país por recibir a los refugiados de medio oriente y Europa "para que puedan reconstruir sus vidas con seguridad y con el sentido de la dignidad que proporciona ganarse el sustento mediante un trabajo honrado".
"Nuestro mundo, atrapado en guerras, violencia e injusticia es testigo de un movimiento de personas sin precedentes", alertó mientras ponderaba al continente africano como el suelo de la esperanza para la humanidad.