
«Hasta ahora, todo negativo. Habían tenido un rastro por una cámara cerca del club Los Yaros que identificó a una persona similar a Romero aunque las imagenes no están muy claras», indicó el abogado.
De inmediato, la Policía usó un barbijo que se había olvidado Romero el día anterior a su desaparición, dado que se le había roto una de las orejeras, para que una perra adiestrada siguiera el rastro.
«Pero no sé como habrá terminado el rastrillaje», dijo Jáuregui. No obstante, no hubo novedades por lo que se deduce que fue negativo.
Ayer, algunos vecinos se sumaron a la búsqueda del atleta recorriendo los caminos aledaños a Villa Zoarraquin. Su esposa, Evangelina, pidió publicamente, a través de declaraciones a la prensa, más apoyo de parte de la Policía en la búsqueda. Incluso, planteó sus dudas respecto de los rastrillajes que realizan dado que nadie la llama desde la Comisaría 5° para decirles en que zona buscaron. «Ya tendria que haber aparecido», dijo.
«Espero que se muevan y hagan bien las cosas. Lo único que estoy pidiendo es que aparezca mi marido. No están buscando a un profugo ni nada. Están buscando a una persona buena, a una persona honesta, trabajadora de toda la vida, un buen padre, un buen marido. Mis hijos necesitan respuestas. Solo espero que aparezca vivo», dijo Evangelina casi sollozando a Central de Noticias.