El bebe estaba internado en el hospital de niños de Buenos Aires y esperaba la llegada de dadores de sangre, en rigor una de más de 100 donantes que se habían presentado pero que no tenìan compatibilidad.
Las muestras de solidaridad se hicieron sentir tanto en Federaciòn como en Concordia. Aquí, en la capital del citrus, los dadores llegaban hasta el hospital Masvernat que era donde tomaban las pruebas que luego eran enviadas al Garraham.
A primera hora de esta tarde, su corazón dejó de latir.