Según fuentes hospitalarias, Fernández sufrió afecciones en el aparato respiratorio y en la parte renal además de daños neurológicos debido a que había transcurrido mucho tiempo desde que sufrió el primer paro cardiorrespiratorio en la términal de ómnibus hasta que llegó al sanatorio privado. Allí sufrió otro paro pero se recompuso de ambos.
No obstante, el cuadro clínico era complicado debido a que sufrió un desbalanceo en las funciones respiratorias y renales. De hecho, la mujer no había podido recuperar la consciencia en ningún momento durante toda la semana. El estado de salud se había agravado el fin de semana hasta que se produjo el trágico desenlace esta mañana a las 8.
Fernández, que había asumido como concejal en representación de Cambiemos en diciembre pasado y luego sufrió la pérdida de su esposo en febrero, venía de un viaje de 14 horas y había arribado a Concordia el domingo 26 de junio. Alcides Murga, médico cardiólogo, dijo el lunes pasado que Fernández llegó a la terminal y allí sufrió una descompensación con pérdida de conocimiento. En cuestión de minutos el paro cardíaco evolucionó dado que la mujer tenía signos neurológicos como las pupilas “vidriáticas y paralíticas”. No obstante, fue reanimada en la guardia y pasó a terapia intensiva. Allí sufrió otro paro cardíaco pero salió adelante nuevamente con los signos vitales deteriorados.