“A la reconstrucción la van empezar en la esquina donde lo mataron”, dijo el padre de Sebastián. “Pero después van a ir viendo los movimientos que hizo mi hijo y por donde anduvo para ya tener una seguridad de lo que pasó”. Además, adelantó que la reconstrucción es el “paso que falta para llevar al policía a juicio”, ya que todas las pericas que realizó Gendarmería apuntan directamente contra Acosta.
En ese sentido, Briozzi contó que el juez renovó por 30 días la prisión preventiva domiciliaria del policía y aseguró que con su abogado, Rafael Briceño, ya plantearon que, una vez que este todo, pedirán que lo encierren en una celda porque existe peligro de fuga. “Si Dios quiere saldrá todo bien y mi hijo por fin va a descansar en paz”, finalizó.
Sebastian Briozzi fue asesinado por el sargento, Antonio Acosta, el 25 de septiembre pasado en una persecución policial. El joven iba a acompañado por su hermano Pedro y Acosta por otro agente que quedó en libertad. En principio, el sargento argumentó todo tipo de historias para justificar un certero disparo en el cuello del Sebastián: “que el joven estaba armado y lo había apuntado”, “que su intención era asustarlo pero luego trastabilló y su arma se disparó”, “Que venían en una persecución porque habían recibido denuncias en contra del chico”, etc.Todas falencias que el abogado del la familia, Rafael Briceño, junto al fiscal Fabio Zabaleta fueron desmintiendo paulatinamente.
A 7 meses del crimen, el último paso que podría llevar a Acosta a juicio, llega este domingo con la reconstrucción del hecho para tratar de demostrar que finalmente no se trataría más que de otro caso de gatillo fácil.
