Durante una entrevista radial, el compañero de fórmula de Daniel Scioli señaló que "es necesario continuar por el mismo camino y profundizar lo que hace falta" en el próximo gobierno y agregó que en el plano internacional es imperioso seguir bregando porque los "organismos multilaterales de crédito se reformulen y escuchen más a los países emergentes".
En este sentido calificó a los fondos buitre como el "nuevo FMI" que conspira contra la "comunidad económica financiera mundial", y destacó que a la Argentina "le ha tocado pararse en su dignidad para defender su soberanía".
Por otro lado, sostuvo que "es imposible que Scioli no sea Scioli; y no se trata de dejarlo ser, como dice la oposición, sino de que actúe conforme a lo que cree". "El primero que habla en contra de la devaluación es Daniel. La persona hace al cargo, y yo creo que cuando uno llega es ahí donde tiene que demostrar cuanta valía tiene, y lo que está dispuesto a hacer", manifestó.
El candidato a vicepresidente comparó al país con un barco: "Agarrramos en el 2003 un barco que estaba hundiéndose y todo roto. Lo fuimos arreglando primero dando prioridad a los que estaban peor, dando empleo, luego seguimos por la primera clase y, si bien estamos llegando a puerto, falta seguir construyendo".
En referencia a la relación con el campo destacó que "hay sectores amplios, pequeños productores que han entendido que necesitan políticas diferenciadas y hay un acercamiento muy importante" y se mostró esperanzo en que los grandes productores "tengan sensatez, porque al tiempo que piden diálogo cuando uno los escucha no encuentra esa llamado precisamente".
Por otra parte, consultado sobre los contratos entre el comentarista deportivo y candidato a diputado provincial Fernando Niembro y el Gobierno de la Ciudad, los interpretó como "el choripán más caro del PRO".
