“La donación del equipo responde a una política de la empresa de devolver en parte el apoyo del gobierno para concluir el proyecto y avanzar en una nueva línea”, dijo Pais titular de la firma entrerriana Cardio Com-Sinebi. Señaló enseguida que el proyecto “da cuenta de la voluntad y compromiso gubernamental de posicionar a Entre Ríos como un polo de conocimiento y crecimiento a partir de la ciencia, la tecnología, y la innovación”.
El electrocardiógrafo, además de su función convencional de instrumentación y registro, transfiere los estudios a una computadora con conexión a Internet para su análisis y diagnóstico por parte de un médico cardiólogo.
El producto posee 12 derivaciones simultáneas y un celular GPRS, con tarjeta SIM, mediante el cual se envían datos a una dirección IP de Internet, que es monitoreada por una PC. De este modo, en la pantalla de la computadora se presenta el electrocardiograma que se realiza de forma remota.
Los especialistas apuntaron que el sistema permite disminuir las hospitalizaciones, reduce las listas de espera para realizar estudios, evita traslados innecesarios, posibilita que el cardiólogo acceda a pacientes geográficamente distantes y optimiza recursos.
El equipo es de fácil manejo y puede ser manipulado por técnicos o enfermeros para que remitan los estudios al cardiólogo, quien se encargará de hacer el diagnóstico pertinente y tomar decisiones en consecuencia.
El equipo es compacto y robusto, sumamente versátil y portátil. El software para PC que utiliza permite almacenar datos personales del paciente y de los estudios que se le realicen, y cuenta con la función de impresión.
En el encuentro en la Casa de Gobierno, el gobernador analizó con los creadores del equipo la posibilidad de dar a conocer el producto a mandatarios de otras provincias o avanzar en la ejecución de un centro receptor de los estudios, entre otras alternativas, para continuar trabajando en forma complementaria.
Respecto al apoyo brindado por la provincia, Galván precisó que recibieron un aporte no reembolsable de 100 mil pesos, tras la presentación de un proyecto a la Actier, lo que les permitió concluir la etapa de software del proyecto, el cual se trabajó conjuntamente con las Universidades Nacionales de Entre Ríos y del Litoral.
Informó que el aparato está siendo probado en Jujuy y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y en unidades de emergencias o en zonas inhóspitas donde se dificulta el acceso a especialistas. Finalmente, señaló que el equipo tiene tres auditorias aprobadas de la Agencia de Ciencia y Técnica de la Nación.