El corte de la ruta “M” fue decidido ayer pero las precipitaciones provocaron que la medida se pospusiese hasta mañana, siempre que mejore el tiempo. Agmer decidió acompañar a los padres y algunos dirigentes se encontraban reunidos esta mañana en la escuela. Entre ellos, estaba Stegbañer, quien expresó que “la comunidad no quiere saber más nada; quiere la construcción de la escuela nueva”.
A pesar de que el secretario de Obras y Servicios Públicos, a cargo del Ministerio de Gobierno, Adán Bahl, anunció que el gobierno comenzará a construir un nuevo edificio en 90 días e invertirá $ 3.500.000, predomina la incredulidad entre los padres. “Están descreídos. Hace casi ya tres años que vienen con esta problemática y la escuela no se construye”, expresó Stegbañer.
Las clases, en estos momentos, están suspendidas. Para revertirse esta situación de parálisis, los padres exigen que las obras “comiencen ya”. “Eso los dejaría tranquilos; quieren ver el obrador y las personas trabajando”, agregó.
Los docentes dictaban clases en cuatro aulas, a pesar de que el edificio cuenta con ocho. Utilizaban un sistema rotativo: “un día lunes viene un 7º, al otro día no viene y viene el otro 7º. Los chicos están perdiendo, no es normal el dictado de clases”, sostuvo el secretario de Acción Social.
Dos aulas están techadas con un tinglado de chapas y tienen divisiones de madera MDF –conocidas por ser fabricadas y suministrada por la empresa Masisa- que, al humedecerse, se están “hinchando” y “pudriendo”.
Los docentes aseguran que parte de su alumnado se ha ido a otros establecimientos escolares porque no soportan “las condiciones climáticas del edificio cuando hace calor y cuando hace frío”. Por ejemplo, en invierno, cuando aparece el sol a la mañana, el rocío condensado sobre la chapa comienza a derretirse y gotea sobre los bancos.
Además, las lluvias acarrean aún más inconvenientes. “Los patios están todos mojados y el cableado eléctrico está todo en el aire”. Para Stegbañer, la escuela está en un estado “deplorable” y es “imposible” dictar clases.
La posibilidad que los padres barajan para evitar pérdida de clases es conseguir otro edificio, debido a que no están dispuestos a permitir que sus hijos concurran a un edificio en condiciones “insalubres”. “Están buscando una alternativa acá en la zona”, dijo Stegbañer.
La escuela alberga los tres niveles de enseñanza: (inicial) EGB 1 y 2; (medio) EGB 3 y Polimodal. Cerca de 320 alumnos componen la currícula de la escuela.