Es tiempo de grandeza

Estimados presidentes de la Argentina y de la República Oriental del Uruguay, Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez, Uds. primero que nadie, deben computar que por primera vez en casi medio siglo de nuestra historia latinoamericana llegan al poder de muchos de nuestros países, políticos que, como Uds. bregaron y soñaron y lucharon para que, por fin, alguna vez, nuestros sufridos pueblos inicien juntos un proceso político, económico y social que nos presente como la patria grande que alguna vez soñaron nuestros mejores hombres.
Allí está el ex obrero metalúrgico Luís Inacio “Lula” Da Silva. Uno de los sindicalistas de izquierda más combativos y con mayor peso en la clase obrera que habían logrado nuestros pueblos. ¡¡ Es presidente de uno de los países más grandes del continente !! : Brasil. Acaso alguien puede asegurar que esa posibilidad figuraba siquiera en los más febriles de nuestros sueños.
Acaso alguien podría decir que alguna vez creyó que los bolivianos se iban a animar a convertir en presidente a un descendiente aborigen y/o que uno de los protagonistas más decididamente lanzados contra la oligarquía de aquel país y el imperialismo norteamericano iba a poder sortear todas las inmensas dificultades que se les presentan a los movimientos populares y llegar, como Evo Morales, a ser presidente de ese país andino. Recordemos sino: en el éxtasis revolucionario de los 70 nos animábamos a arañar la utopía de creer que la clase trabajadora podía llevar al poder a un obrero minero y que hasta se podía construir un doble poder, pero ¡¡ un aborigen !! impensable, decididamente.
Cuántos años, cuánto sufrimiento y muerte debieron soportar nuestros pueblos para que un hombre proveniente de fuerzas armadas corrompidas y sucias de sangre, como las que asolaron a nuestros pueblos durante decenas de años, rompiera con esa tradición y encabezara uno de los gobiernos más decididamente jugados a una verdadera unidad latinoamericana como lo que representa el hijo de la patria de Simón Bolívar y presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías.
Cuántas veces cree Ud. presidente que muchos de los hijos de su país y del mío, lloramos al ritmo de Alfredo Zitarrosa la tristeza que representaba para los patriotas de ese paisito, el exilio en tierras lejanas. ¿ Sabe Ud. con cuánta alegría acogimos a uno de los líderes de su país que regresaba a estas tierras a desafiar a los dictadores como fue el caso de Wilson Ferreira Aldunate ?
Puede imaginarse presidente el sueño que representaba para millones de setentistas de este y de aquel costado del río, que el Frente Amplio lograra romper la alternancia de blancos y colorados y que, por fin, los perseguidos y más jugados militantes de la vida, la democracia y la libertad llegaran al poder, ganaran las elecciones.
No nos desilusione presidente, no nos haga pensar que la derecha tiene razón y que el poder puede más. Sea enérgico con Botnia presidente, no con nosotros. No permita que blancos y colorados lo empujen a tomar decisiones que están lejos de su historia y de la del frente. No nos amenace con el ejercito presidente, eso sería propio de Bordaberry no de Ud. El frente, presidente, es sinónimo de mateadas populares, de tamboriles alegres, de murgas protestonas, de gente luchadora, de hombres y mujeres comprometidos con los más sufridos, no de uniformes amenazantes, no de chauvinistas ni de patrioteros con discursos que alientan la enemistad entre viejos amigos. ¡¡ Cómo es eso presidente de enojarse con ENCE porque escucha y se va y no con Botnia que padece sordera crónica y que hasta se animó a dejarlo pagando a Ud. luego de haber acordado con nuestro presidente en Chile !!. Recapacite presidente, no es bueno sobreactuar nacionalismo con amigos y vecinos.
Estimado presidente oriental, hasta me animaría a decirle que hay muchos por estos lares a los que nos parece demasiado intransigente la postura de nuestros comprovincianos y dudamos si esa actitud no va a complicar el logro de objetivos mayores, pero debe saberlo y transmitirlo así presidente, no es la prepotencia de pertenecer a un país más grande lo que anima a los entrerrianos a tener esas actitudes intransigentes. Es, al contrario, la indignación frente a la prepotencia del capitalismo mundial que, con su dinero apuntan a doblegar a los pueblos. Es sí, la necesidad de alertar e impedir que contaminen nuestros cursos de agua y le arruinen la calidad de vida a nuestras poblaciones. Es la dignidad la que nos mueve, es el futuro, es la vida sana, es poder seguir viviendo del turismo, es poder crecer sin que hacerlo implique afectar a nuestros vecinos. Es esa simpleza presidente, no estamos toreando su autoridad, al contrario, necesitamos de su autoridad intacta para que pueda hacer del Uruguay un país más justo, digno y capaz de mandar a la cárcel a los asesinos y torturadores.
Hay muchos motivos para festejar, presidentes, un dictador y asesino de su pueblo acaba de morir.
Augusto Pinochet y sus sostenedores, nunca pudieron sospechar que ese pueblo al que había matado, torturado, amordazado, perseguido, y robado, iba a convertir en presidente a la hija de quien torturó y asesinó : a Michelle Bachelet.
El Chile oscurantista que quiso diseñar le respondió eligiendo presidente a una mujer, socialista y agnóstica que, además, pasó por sus cárceles.
Ecuador, uno de los países más inestables del sub continente acaba de darnos otra seña: eligió presidente a alguien que quiere salirse del ALCA y añora ser aceptado por nuestro incipiente MERCOSUR.
Me falta Ud. mi presidente a Ud. le quiero decir que, a millones de ciudadanos de este país, les ocurre algo rarísimo. Ud. sabe que lo normal en nuestros países y desde hace años, es votar por alguien y, a los pocos años, bramar de bronca por haber cometido tamaño error. Bien lo raro aquí es que con Ud. es al revés, hay millones que no votaron por Ud. pero, a cuatro años de su gobierno se animarían a hacerlo y hasta aconsejarían sin temor, a otros, a que lo hagan. ¡¡ Fue Ud. quien hizo posible ese milagro, presidente !! no lo arruine.
Mire, me animaría a decirle que en todos estos países que he ido nombrando, los pueblos, es decir, nosotros, no les pedimos la revolución, la guerra al imperialismo, la socialización de los medios de producción, el control obrero. Tampoco la expropiación a la oligarquía terrateniente, ni la apropiación del capital multinacional. Nada de eso.
Quizá porque aprendimos, quizá porque no queremos perder lo poquito o mucho que se está logrando, o porque nos volvimos reformistas o quizá porque entendemos lo difícil que les resulta dar cada paso adelante en sociedades bastante poco acostumbradas a dar pasos hacia delante, quizá porque somos menos revolucionarios o porque nos convencimos que es mejor intentarlo de a poco ¡¡que esa es la que va!! o porque nos cuesta creer que lo que antes parecía un sueño (unidad latinoamericana y gobiernos de izquierda y/o progresistas en la mayoría de nuestros países), hoy y sin saber bien cómo, es realidad. No lo sabemos. Pero por eso mismo es que sólo les pedimos que hagan un esfuerzo para no arruinar este momento único e irrepetible de la historia. Esta todo dado para que cada vez estemos más juntos y es francamente fuera de toda lógica que, justamente, Argentina y Uruguay, más aún, que sangre Charrúa sean justamente los que pudran la posibilidad de una América Latina unida en concreto
¡¡ Presidentes !!, fueron capaces de sacar de debate el tema del ALCA, de hacerlo volver a George Bush con la cabeza gacha desde Mar del Plata, de introducir como preocupación la necesidad de nuestros pueblos de estrechar lazos de amistad y solidaridad para ayudarnos unos a otros. Allí está el caso de SanCor y la actitud de Venezuela, la utopía del gran gasoducto del sur. Bolivianos y chilenos comienzan a mirarse diferente, estamos animándonos a transponer la mera cuestión arancelaria para pasar a otro estadio.
Sabemos que lo que tenemos no es la panacea, que falta mucho, que nuestros pueblos aún sufren miseria, desocupación, marginación y falta de educación y que a Uds. les toca todavía resolver el problema de la injusta distribución de la riqueza y de un sistema tributario que le saca más al que menos tiene.
Sabemos todo eso presidentes. Pero sabemos también que todos esos índices han mejorado en Brasil, en Venezuela, en Uruguay, en la Argentina, en Chile. Es temprano para decir lo que vaya a ocurrir en Bolivia pero, por lo pronto, el gobierno ha jugado cartas procurando mayores recursos para el país y obviamente para su pueblo.
Y lo principal, lo más importante, sabemos que, con unidad, resolver todos esos temas pendientes será mucho más sencillo.

Entradas relacionadas