El financiamiento que dará el Banco Mundial irá destinado “fundamentalmente para equipamiento, tanto informático como de laboratorio. Además, se apunta a subsanar la falta de una red de comunicación entre las distintas direcciones departamentales de Educación. Aspiramos a que, con este crédito, las departamentales queden debidamente equipadas. Y para eso hay que capacitar a la gente. La Remington no existe más. Hay una tarea de capacitación y reconversión que hacer”, dijo Elías Stang, asesor ad honorem del Consejo General de Educación (CGE).
Los fondos que se consigan no podrán destinarse a construcción de edificios nuevos. “El Banco Mundial impone condiciones, y entre éstas, está que el dinero para infraestructura no debe ser utilizado para construcción de aulas y edificios. En caso de construcción, será sólo lo que demande la instalación del nuevo equipamiento, como salas de informática o dependencias para laboratorios”, añadió Stang.
Leonardo Palladino, de la Unidad de Financiamiento Internacional del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación, quien estuvo en la provincia en junio último, destacó que Entre Ríos viene trabajando desde fines del año 2004 y ha cumplido con todos los informes.
Se estima que hacia septiembre próximo el Gobierno nacional podría estar firmando el acuerdo respectivo con el órgano de crédito internacional.