“Quisieron sembrar el miedo por todos los medios, pero la gente ya había elegido cambiar ¿y qué pasa con el cambio? Nada más y nada menos que una nueva forma de hacer y de pensar, incluyendo a todos los argentinos”, argumentó el dirigente.
“La victoria ha sido contundente y Entre Ríos acompañó el cambio con diferencias mayores a las obtenidas en octubre. Queda claro que se terminó una etapa, no solo en el país, sino también en nuestra provincia”, remarcó Kneeteman.
“El mensaje es claro: en Entre Ríos, el triunfo de Cambiemos fue categórico y de este modo se terminó el manejo discrecional de todas las decisiones de Gobierno, Gustavo Bordet deberá trabajar en función de este nuevo escenario y escuchar lo que está pidiendo la gente, que no es otra cosa que diálogo, transparencia y búsqueda de consenso, para sacar la provincia adelante”.