El incidente se produjo aproximadamente a las 15, en el domicilio de calle Lucilo López 1.047, propiedad de Pablo Martín Caire de 35 años, quien al parecer se encontraba realizando una excavación en el fondo para realizar una construcción y, mientras trabajaba, se encontró con un extraño elemento con forma de proyectil de considerable tamaño. Ante esta situación, Verónica Rodríguez, esposa de Caire, llamó inmediatamente a un funcionario policial que vive en el barrio, quien no dudó en dar aviso a Bomberos.
Perito
Conocida la novedad del hallazgo, se dio intervención al experto en explosivos, comisario principal Arturo Benedetto, quien acudió al domicilio para constatar de qué se trataba. Tomando los recaudos del caso y sin personas civiles en su entorno que pudieran correr riesgos, el perito revisó el artefacto y procedió al traslado a la Brigada de Explosivos, del Cuartel de Bomberos de La Histórica, informando la novedad a las autoridades policiales y judiciales, consigna Uno.
Benedetto señaló que se trataba de un proyectil de mortero de 81 milímetros de uso militar, el cual, si bien estaba degradado en su aspecto por el tiempo, tenía su carga de trotyl, lo que no deja de ser peligroso, por lo que se debió trabajar con suma precaución para su traslado.
Se desconoce cómo pudo llegar este peligroso elemento al lugar, pero se presume que esa zona pudo ser terreno de ejercitación del Ejército.
