La policía de Chajari allanó en la tarde de este martes una vivienda del Barrio Bicentenario, en la zona norte de la ciudad, donde habita una mujer de entre 30 y 40 años y que fuera señalada como la usuaria de dos tarjetas de crédito de las empresas Mastercard y Consumax, que estaban dentro de la billetera que una vecina de la localidad perdió en algún momento de la mañana del sábado. La denuncia que radica en la Comisaría local, da cuenta de que al advertir sobre el final de la mañana que había perdido la billetera probablemente varias horas antes, la dueña hace la denuncia cerca de la tarde a MasterCard, anoticiándose en ese momento que durante esas horas desde que extravió sus pertenencias (no supo precisar en que lugar) se habían hecho seis compras con el plástico de esa entidad crediticia. Posteriores averiguaciones permitieron saber que también se uso un par de veces la Consumax. Las uso en cinco o seis negocios de Chajarí.
“Nosotros comenzamos a averiguar y pudimos saber donde estaría el domicilio de la persona que uso las tarjetas” contó a DIARIO JUNIO el Jefe de la Comisaría de Chajari, Comisario Fabio Noya. “En la tarde de hoy se allana y se encuentra la mercadería que había adquirido con las tarjetas”, señaló. El funcionario policial no pudo precisar la cantidad de dinero gastado por la mujer que prácticamente usurpó la identidad de otra, ya que la misma obra en poder de las empresas de tarjetas de crédito por el momento.
La mujer identificada como usuaria apócrifa de las tarjetas no quedó detenida ni tiene ningún tipo de antecedente. Noya contó, además, que “evidentemente algo falló” en el sistema para inutilizar una de las tarjetas el sábado, porque “ayer (por el lunes) también se hicieron un par de compras”.
El policía aclaró que “es difícil definir el delito porque no es estafa ni tampoco se puede decir que la mujer robó las tarjetas. Salvo que se pueda interpretar como un engaño el hacerse pasar por el titular. Pero hay que tener en cuenta que el comerciante debe pedir el documento cuando se compra con tarjeta. La maniobra de esta mujer prospera por la negligencia de los comerciantes. Es mas, sabemos que la mujer fue a un negocio y no pudo comprar algo que pretendía porque el vendedor le pedía el DNI” remarcó.