El arma hallada en el lugar del hecho tenía cinco proyectiles, pero ninguno de ellos en la recámara, aunque se comprobó que estaba apta para disparar.
Fuentes vinculadas a la causa, explicaron que el no hallazgo de huellas digitales pudo deberse a «manoseo» y a las «pisadas» que hubo en la pistola cuando se produjo el tumulto entre los militantes para detener a Sabag Montiel.