Los empleados adujeron no saber quién los contrató. “No tenían el nombre del empleador”, indicó Delgado. “Queremos saber cómo vinieron, como llegaron”, dijo. Según manifestaciones de los jornaleros, vinieron a Concordia en forma particular y el viaje, junto al alquiler, se los pagó la persona que los contrató. En cambio, del alimento y del pasaje de vuelta deben encargarse los trabajadores.
Además, acotó que las condiciones del lugar no eran las adecuadas. Se trata de un inmueble antiguo que fue dividido por sectores como si fueran habitaciones. En algunos viven familias que alquilan. “Atrás había una familia que alquilaba en forma particular y adelante otra familia”, dijo. Y cuando trataron de dar con el propietario, se encontraron con que es una persona que, supuestamente, no está en Concordia y que dejó a un encargado para que controle.
Delgado indicó que el estado de los sanitarios no es la adecuada. “Había dos baños para los 20 pero habría que dividir: que tengan un baño las mujeres y otro los varones. Y estaban medio mezclados”, admitió.
Respecto de la instalación eléctrica, remarcó que los cables estaban a la vista y no había un disyuntor por sector. En la cocina solo había dos anafes y garrafas. El matafuego estaba vencido.
Personal de la Dirección de Prevención y Seguridad Ciudadana y la Dirección de Inspección General de la Municipalidad de Concordia, junto a la Policía de Entre Ríos, Gendarmería Nacional, la Delegación de la Secretaría de Trabajo de la provincia de Entre Ríos y la Superintendencia de Riesgos del Trabajo de la Nación, realizó el operativo conjunto, en el que se constató las condiciones en que estas personas se encontraban viviendo.
Luego se labró un acta notificando a los responsables del predio quienes deben cumplimentar con todos los requisitos y condiciones que en defensa de los derechos de los trabajadores establecen las normativas vigentes.