La rotonda de acceso a Chajari comenzó a modificarse desde inicios del mes de noviembre y al momento los trabajos avanzan a buen ritmo, con el acompañamiento del clima. La intervención obedece el objetivo de ensanchar su calzada, y dejarla así en condiciones similares a los rasgos que presentará la Autovía 14, que ya está en una etapa avanzada en la zona. La principal modificación, en un primer momento, la observaron y sintieron los vehículos que vienen desde el sur que quieren ingresar a la ciudad, ya que ese es el sector que se ha comenzado a alterar. La idea es demoler los “bigotes” (las puntas) de la rotonda –el círculo central no se toca- y volverlos a construir a unos metros corridos de los lugares en que estaban. Esto se debe a que el nuevo carril de la Ruta 14 llega a la entrada de Chajarí al oeste del viejo (es decir, a la izquierda para quien viene del sur), y luego de la rotonda pasa al este (a la derecha para quien viene del sur). Esto implicó que la parte sur del derivador esté inutilizada, habiendose trazado un camino alternativo por el cual todo vehículo que venga desde ese punto cardinal deba tomarlo. Para quienes provienen del norte, el cuadro es diferente, ya que pueden ingresar por la Avenida Padre Gallay (la de las termas) que, además, está pavimentada.
El ancho de la calzada sobre la rotonda pasará de tener ocho a doce o doce y medio metros. Galeana expresó que “la fisonomía de la rotonda seguirá siendo la misma”, solo que con un ancho mayor en su parte transitable. Y volvió a manifestar que “las obras podrían estar terminadas (si el clima acompaña) en marzo” de 2011.