Lapiduz recordó que hace un par de meses la situación estaba de una forma y ahora está de otra. “Nosotros seguimos trabajando dentro de la entidad buscando la mejores herramientas que podamos tener para esta temporada turística que ya fue anunciada nacional y provincialmente”, dijo Lapiduz.
La Asociación formó una subcomisión de promoción y están trabajando dentro del Emcontur con la Secretaría de Turismo para estar preparados para el 4 de diciembre, que fue la fecha estipulada para comenzar la temporada.
Pero a 15 días de que llegue la fecha, las perspectivas no son las mejores. Lapiduz indicó que participaron de la reunión una reunión con el intendente Alfredo Francolini donde se decidieron las últimas restricciones. “La idea de él es, de algún modo, enfrentar esta situación ahora, tratar de bajar los números para en diciembre bajar un poco los números”, explicó Lapiduz.
Al menos, sostuvo que los emprendimientos gastronómicos pudieron mantener los horarios en los que venían trabajando y las modificaciones afectaron más que nada al comercio en general. Sin embargo, Lapiduz dijo que “se apaga la ciudad” y eso “afecta el trabajo de todos”.
No obstante, se esperanzó en que las medidas sean realmente útiles para que en diciembre puedan tener un poco mas de trabajo. Y la esperanza es que al menos familiares de familias concordienses puedan tener el acceso más libre para venir a pasear por la ciudad. “Ojalá que así sea”, dijo.
Al mismo tiempo, se mostró cauteloso teniendo en cuenta que en otros lugares donde se tomaron medidas simulares no siempre dieron resultados positivos. “Muchas veces a las 15 días no hay una baja pronunciada de los casos y ahí ya estaríamos hablando de otro escenario”, expresó. “Sería un diciembre muy preocupante y muy triste: de hecho ya lo es”, indicó.
Por último, Lapiduz mencionó que durante la pandemia cerraron 10 establecimientos gastronómicos. “Muchos no eran conocidos y parecía que no pasaba nada gasta que llegó el cierre de Americano”, un tenedor libre que dependía de una familia con muchos años en el rubro. “Ahí nos dimos cuenta que nos podría tocar a todos”, añadió. Y en el rubro hotelero, cerró Mayim hace dos meses. Y más recientemente, el Hotel Salto Grande decidió que no abrirá sus puertas incluso en la temporada de verano. Se trata de un hecho inédito para la ciudad ya que el establecimiento nunca cerró sus puertas en 70 años. “Ni siquiera un feriado”, acotó Lapiduz.