Esta vez fue la quinta vez en el año que se comete un robo en la escuela ubicada sobre el boulevard Montana 546. Según explicó la directora a ElDía, Daniela Patrone, la Policía la alertó de lo sucedido a las 3.20 de la madrugada: “Habían ingresado por el comedor, por la misma ventana que en otras oportunidades, pero no tuvieron necesidad de violentarla porque la persona que ingresó lo hizo entre un barrote y el extremo, donde había un espacio mayor, pero sólo se constataron huellas de una sola persona”.
Una vez que el delincuente accedió al interior, se dirigió a la cocina y de la heladera extrajo 15 kilos de pollo, 5 de carne picada y otros 5 kilos bife de chorizo, pero además de la carne que estaba destinada para la elaboración del almuerzo para los 250 alumnos que concurren en los dos turnos, robó una pieza de dulce de batata.
En una de las aulas se rompió un vidrio y se abrió un mueble que tenía la docente, donde se confirmó la faltante de dos buzos polar azules. Tras esto, el delincuente – que seguramente tenía su asistencia desde el exterior – abandonó el lugar.
“Estamos asegurando las rejas, poniendo más barrotes y dejarlas más fuertes”, indicó Patrone, que ya no sabe qué hacer para evitar que su escuela sea víctima de la delincuencia. Sabe o percibe que quienes entran por las noches son personas que conocen muy bien el establecimiento y que están informados de lo que se adquiere.