Giampaolo aseguró que el tema fue abordado de manera informal entre los ediles dado que no hay ninguna presentación en el cuerpo ni en la comisión de control de las termas. “Como concejales tratamos de intervenir en todos los temas que, de alguna u otra manera, preocupen a la sociedad”, dijo. Y tratándose de un tema que tuvo repercusión pública, el edil dijo que solicitó información extraoficial.
“Realmente estamos ante un hecho complejo que camina por una zona gris”, señaló. Giampaolo indicó que a la empresa la asiste los derechos de admisión y de permanencia. En el último caso, se aplica en los casos en que un turista realiza “un acto que perturbe el bienestar y la tranquilidad que merece el resto de los usuarios del complejo termal”.
El edil señaló que desde Verter SA se alegó una “inconducta apercibida ante lo cual no hubo modificación de esa conducta”. “Por eso se decidió la exclusión”, dijo. Y añadió que el responsable de la empresa “puede ser responsable de algún daño que se infrinjan a sí mismo” quienes lleven adelante un comportamiento fuera de lugar.
El presidente del Concejo también se hizo eco de la versión que dio el director de la escuela, Julio Barrios, quien aseguró que los alumnos se comportaron correctamente y que fueron discriminados. “Lo cual si es así nos parece absolutamente reprochable pero no tenemos la versión completa, confiable”, dijo. Más adelante, aseguró que, de existir un abuso de autoridad de parte de la empresa: “no vamos a dudar en sancionarlo”.
Pero en caso de que Verter haya procedido de manera correcta por el mal comportamiento, Giampaolo apuntó a los padres de los alumnos, a quienes les pidió que concienticen responsablemente a sus hijos. Y aseguró que son testigos de otros casos de chicos que realizan desmanes en la vía pública como los bikers y skaters que producen daños en la peatonal. “No logramos que los padres pongan algún límite en la situación”, señaló. Por ello les pidió a los progenitores que “hablen con sus hijos y les muestren que ese no es el camino”.
Otro ejemplo que mencionó fue el de los alumnos de las escuelas secundarias a las que el municipio les prestó los galpones del puerto sin costo alguno. “No tuvimos la contraprestación en el cuidado de esos elementos, apareciendo persianas destruidas, muros históricos pintados o rotos. Te llevan a dudar si el día de mañana hay que prestar o no esas cosas”, indicó.
Termas sociales
La cláusula 16º del convenio sancionado en abril de 1999 establece que, dentro de los noventa días de aprobado el mismo por el Concejo Deliberante, “‘Verter’ se obliga a extender un caño de dos y media (2 ½) pulgadas a un terreno de propiedad de la Municipalidad de Concordia ubicado al sur del predio dado en concesión…la Municipalidad de Concordia se obliga a utilizar el predio exclusivamente para el desarrollo de Programas Sociales orientados a niños y jóvenes de escasos recursos de hasta dieciséis (16) años de edad y a discapacitados”.
Sabido es que en el predio ubicado al sur del complejo de Verter nunca se construyó nada. Giampaolo explicó que se necesita de una “fuerte inversión” pero que “todavía no se han ido dando las condiciones como para que se pueda desarrollar un emprendimiento importante”.
No obstante, admitió que hay proyectos en curso que aún no fueron dados a conocer. “No quiero ser yo quien las anuncie pero hay ideas muy interesantes para trabajar no sólo con lo social sino con lo terapéutico. Es una cuenta pendiente porque el agua termal sirve también para lo terapéutico”.
De igual modo, dijo que de construirse unas termas sociales o terapéuticas, no pueden convertirse en “la receptora de la inconducta de chicos que no es permitida en el sector privado porque volvemos al Estado bobo, donde se puede hacer cualquier cosa, romper todo, que no se puede hacer en el sector privado. Deben cuidarse de la misma manera, o con más celo, que lo que se cuidan las termas privadas”.
