En total, la Policía secuestró 24, 500 kg. de cocaína y marihuana en 34 procedimientos que dejaron como saldo 16 personas detenidas. Las estadísticas revelan que se secuestró 9,1 kg. de cocaína en 14 procedimientos y 15,5 kg. de cannabis sativa (marihuana) en 20 operativos.
Las sustancias fueron incautadas en procedimientos realizados en el puesto de Toxicología ubicado en avenida Presidente Perón, cerca del Puente Alvear, en el destacamento ubicado en avenida Monseñor Rösch, a la altura de las Termas, y en allanamientos realizados en distintos puntos de la ciudad.
“Dentro de estos procedimientos está la famosa cocina que secuestramos en la ciudad de Calabacilla, en un galpón descampado donde encontró elementos que aducían a una cocina de cocaína”, indicó Faust. “Cocina es un lugar donde termina la fabricación de la cocaína. Al tener la cocaína pura, se estira combinando con los diferentes ácidos”, señaló.
El procedimiento se llevó a cabo en mayo pasado, en una tapera abandonada en la zona rural de Calabacillas y el valor de los elementos secuestrados (200 kilos de sustancias químicas en polvo y unos 80 litros de ácido) ascendían a los $ 500.000 aproximadamente. Faust aseguró que desconocen adonde se dirigía lo que se producía en ese lugar. “No sé si estaban preparados esos elementos para exportarlos, no sabría decirte”, explicó.
Si bien hace un año y medio que Faust se desempeña en la División, entiende que el consumo de drogas se ha difundido en la ciudad. “En los últimos cinco años ha tomado una difusión terrible”, expresó. “Todos los delitos que tenemos siempre se originan a través de la droga”, expresó.
A manera de ejemplo, destacó lo que sucedió durante una charla educativa en una escuela primaria con alumnos de 5º y 6º grados. “Siempre cuando empezamos la charla, hacemos unas preguntas de que ellos entienden por drogas. Quedé impresionado de cómo ellos sabían lo que era la droga siendo tan jóvenes. Eso trae aparentado como crece la droga; como está en los barrios bajos”, indicó.
