El reclamo gremial es que se aplique un incremento del 12 %. Y ese índice podría luego trasladarse al valor de las cuotas en los colegios privados.
“El costo principal en las escuelas es el salario. Y como no todos los establecimientos tienen el 100 % de los cargos u horas cátedras con reconocimiento presupuestario del Estado, está claro que un aumento de sueldos impactará en sus finanzas. Pero esa recomposición de las cuotas deberá fijarse una vez que sepamos cuál será el incremento para los docentes. La actualización que se haga va a depender de ese resultado”, precisó Osvaldo Bodean, presidente de la Asociación de Escuelas Públicas de Gestión Privada.
Pero aún cuando todavía no hay bandas precisas respecto a cuánto podría llegar el incremento, algunos colegios, como el Instituto Cristo Redentor, evalúan que la actualización podría andar entre el 10 y el 20 %, según expresó la rectora, Liliana Kalea. “Tenemos pensada la posibilidad de un aumento tanto en el valor de la inscripción como también en las cuotas. Pero es cierto, y es algo que es importante rescatar, que si lo aumentamos, tratamos de que sea una sola vez en el año, y que no sea exagerado. Sólo buscamos cubrir los gastos”, señaló.
APORTES RECORTADOS
Las escuelas públicas de gestión privada que cuentan con reconocimiento financiero del Estado entrerriano suman casi 400 y albergan a una población estudiantil superior a los 76 mil alumnos en los distintos niveles y modalidades. Por el principio de cofinanciamiento, el Poder Ejecutivo asume el pago de los salarios docentes, y cada institución corre con el resto de los gastos, tanto en mantenimiento edilicio como en la ampliación de aulas y oferta pedagógica.
Pero desde hace una década ese equilibrio se quebró: el Estado aprobó sucesivamente el aumento de la oferta pedagógica de la educación privada pero no acompañó ese crecimiento con una mayor inversión. La consecuencia fue que muchas escuelas debieron afrontar con recursos propios —fundamentalmente el derivado del cobro de cuota a los alumnos— el pago de salarios docentes. No hay estimaciones oficiales certeras, pero una evaluación hecha por las escuelas privadas sostiene que el 40 % de los aproximadamente 7.000 docentes que se desempeñan en el sector son pagados con fondos de las instituciones privadas.
En octubre de 2005 el Estado subsanó ese retraso y redistribuyó nuevos fondos a las escuelas, y hace un mes volvió a hacerlo, aunque todavía el desfase es notorio. “No fue una decisión que alcance a todos por igual. En realidad, se dieron uno o dos cargos por escuelas, y se benefició sobre todo a las que tienen mayores necesidades”, opinó el padre Sergio Jacob, titular de la Junta de Educación Católica del Arzobispado de Paraná.
El padre Oscar Rigoni, responsable de la Pastoral de Educación del Obispado de Concordia, entendió que el panorama económico que se les presenta a las escuelas indica que en 2007 habrá aumento de cuotas. “El aumento que nos autorizaron este año quedó desfasado y las instituciones educativas han perdido poder adquisitivo, y han gastado todas sus reservas económicas, que normalmente destinan a mantenimiento. Y si bien fue un alivio que nos reconocieran algunos cargos, la situación se agravó por la imposición de que no debemos superar el 8 % de suplencias”, sostuvo.
ARANCELE
De todos modos el reacomodamiento de aranceles en la educación privada previsto para 2007 deberá observar los topes máximos que en diciembre de 2005 fijó el Consejo General de Educación (CGE), que en escuelas de nivel inicial y de educación general básica (EGB) I y II ronda entre 35 y 47 pesos las cuotas, y en educación general básica (EGB) III y media-polimodal, va desde los 52 a los 70 pesos.
La resolución 4.647 que autorizó las subas vigentes en el ciclo lectivo 2006 justificó la necesidad de ese reconocimiento en los sucesivos aumentos salariales otorgados por el Gobierno a los docentes, por lo cual los apoderados legales de los institutos privados “deben hacer frente a los aumentos en los cargos que no cuentan con aporte estatal como así también a los aportes y contribuciones correspondientes”.
Pablo Mernes, rector del Colegio de las Hermanas Mercedarias, asegura que la falta de reconocimiento presupuestario de cargos docentes los obligó a reducir divisiones en nivel medio. “Desde jardín hasta séptimo tenemos dos divisiones. Pero en secundario, una sola división. Y en el polimodal se nos forma un embudo, y por eso no podemos abrir la inscripción. Nos manejamos con nuestros propios alumnos, que pasan de un nivel a otro. Más chicos no podemos recibir”, argumentó.
Qué rige hoy
LA RESOLUCIÓN 4.647 DEL 29 DE DICIEMBRE DE 2005 fijó las bandas arancelarias que el Consejo de Educación autorizó a cobrar a las escuelas privadas que cuentan con aporte económico del Estado para abonar salarios docentes.
El esquema es el siguiente:
Nivel inicial y EGB I y II
Cuando el aporte estatal cubra hasta el 100 % de los cargos, la cuota máxima que pueden cobrar es de $ 35 Cuando ese aporte llegue sólo hasta el 80 %, el monto que se fijó fue de $ 47.
Nivel EGB III y Media y Polimodal
Cuando el reconocimiento de cargos por parte del Estado sea del 100 %, el máximo que pueden percibir es de $ 52. En caso de que el reconocimiento económico llegue hasta el 80 %, hasta $ 70.
Nivel Superior
En institutos con reconocimiento económico del 100 % de los cargos, las cuotas autorizadas a percibir tienen un tope de $ 75. Cuando el reconocimiento sólo alcance hasta el 80 %, el monto máximo que se fijó fue de $ 135.