Laferriere aseguró que la intención del PRO es mostrar que hay “otra forma de hacer política”. Y sostuvo que se basa en el “diálogo y el consenso, dejando atrás la prepotencia y el autoritarismo”. Otros adjetivos que utilizó para definir el proyecto de gobierno fueron “transparente” e “integrador”.
En primer lugar, indicó que buscan realizar una reforma política para erradicar un sistema electoral “perverso” por la falta de ballotage para definir al Ejecutivo, “mayorías automáticas” en la Cámara de Diputados o en los Concejos Deliberantes donde el que gana se lleva la mayoría. “Es retrógrado, conservador y no ayuda a la representatividad de la gente porque el concejal termina dependiendo del Ejecutivo y no del vecino que lo votó”, resaltó.
También propuso eliminar “de cuajo” las listas sábanas para que no haya candidatos a diputados “escondidos” detrás del primer postulante. “Son 33 candidatos que no aparecen en ningún cartel, en ningún medio. No los conocen”, expresó.
Asimismo, destacó que Santa Fe y Córdoba ya realizaron elecciones con el sistema de boleta única. “Nosotros seguimos con el mamarracho de la lista sábana, con diputados que van prendidos del saco ajeno y con fiscales que tienen que andar cuidando que no les afanen la boleta”, señaló.
El aspirante a vicegobernador destacó que el proyecto de gobierno excede a las propuestas legislativas. Y señaló que en Entre Ríos no hay un proyecto de provincia “claro” por lo que muchos jóvenes emigran a otras provincias. Luego de finalizar sus estudios, se radican lejos y desarrollan allí su vida. “Entre Ríos tiene 1.000.000 de entrerrianos que viven fuera”, dijo. “Los padres, cuando sus hijos cumplen 18 años, están perdiendo un hijo”, agregó. “La calidad de vida se deteriora: no es lo mismo vivir con tu hijo cerca que a 500 km. de distancia”, expresó. Para revertir ese éxodo silencioso, Laferriere aseguró que se debe otorgar valor agregado a la producción primaria.
En comparación con Santa Fe y Córdoba, la provincia sale perjudicada. “Entre Ríos aporta el 20 % de lo que aporta Santa Fe en cuanto a producción y no llega al 15 % respecto a Córdoba. Estamos muy lejos de ser un polo productivo generador de divisas como Santa Fe y Córdoba que hace que haya mayor recaudación en dichas provincias, autopistas, obra pública, calidad de la educación, salud en los hospitales”, precisó.
En otro pasaje de la entrevista, Laferriere explicó por qué razón eligieron acompañar la candidatura de Eduardo Duhalde, un exponente de la vieja política, diametralmente opuesto a la imagen de transparencia con el que PRO se presenta a la sociedad. Básicamente, al bajarse Mauricio Macri, la elección del ex vicepresidente de Carlos Menem fue por descarte. “Teníamos a Cristina, Alfonsín, Duhalde, Binner y Carrió. Cristina y Alfonsín tienen sus candidatos a gobernador propios y entre Binner, Carrió y Duhalde, era Duhalde el que nos garantizaba crecimiento económico con paz social”, señaló. En cambio, Binner y Carrió poseen “ideas y valores que por ahí no pueden ser compartidos completamente”.
Respecto a la paz social, Laferriere recordó el Diálogo Argentino de 2002 y 2003, cuando convocó a la Iglesia Católica y a todos los sectores sociales de la República. “Se pudo salir de tan caótico momento que vivió nuestro país”, señaló. En cambio, no recordó los asesinatos de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, lo que le costó a Duhalde adelantar las elecciones.
Por último, al analizar la perfomance electoral de Macri en Capital y del cómico Miguel Del Sel en Santa Fe, señaló que no fueron votos al PRO sino una expresión de la gente que quiere “un cambio en la forma de hacer política”. No obstante, no lo definió como “voto castigo” porque “puede ir para cualquier lado”. Y no se mostró interesado en cosechar ese tipo de preferencia electoral. “Nosotros tenemos un proyecto de provincia y vamos a ir a las urnas con las banderas bien altas: transparencia en el gasto público, modernización del sistema electoral y una provincia donde la gente pueda desarrollar su plan de vida acá”, sintetizó.
