“Esto forma parte de la reestructuración en Salud, por los cambios que ha habido y en función de querer dinamizar un poco la actividad de la salud pública por los acontecimientos últimos”, explicó el funcionario, quien asumió el martes al frente de la Secretaría de Salud, tras aceptarse la renuncia de José María Legascue.
Consultado sobre si los directivos fueron reemplazados por considerárselos responsables en alguna medida por la transfusión de sangre con HIV a una mujer embarazada, Elizalde señaló que ese tema “es una cuestión que está delimitada a la Justicia”, en tanto sostuvo: “He planteado la necesidad de establecer pautas de trabajo que tengan una dinámica diferente, para lo cual se necesita un grupo de gente diferente de la que ha estado trabajando hasta ahora, sin que esto signifique profundizar conflictos. Simplemente ha terminado una etapa y es necesario empezar una nueva”.
De todos modos, aseguró que se trata de “una decisión de Gobierno” ya que “surgió de conversaciones, de acercar posiciones, de tratar que los traspasos sean lo menos traumáticos posibles, porque lo que está en juego es la salud de la población. Esto ha surgido de las necesidades que hemos visto en los últimos días”, apuntó.
Respecto de las personas que ocuparán el lugar de Haenggi y Schnitman, el secretario de Salud dijo: “Todavía no podemos confirmar los nombres de quienes los reemplazarán”, pero aseguró que “en las próximas horas se darán a conocer”.
Asimismo, adelantó que “posiblemente también se produzcan cambios en el Hospital Domagk”, aunque no confirmó si se sustituirá al Director de ese nosocomio, Roberto Lares.
“En total vamos a hacer modificaciones en tres hospitales de la ciudad. Estamos conversando con la gente que queremos incorporar, y entre hoy y mañana se van a conocer los nombres de los reemplazantes”, aseveró por último.
