Bertelloti admitió que este año se adelantó la campaña de vacunación -comenzó el 2 de abril- dado que normalmente se inicia en la segunda quincena de abril o primera de mayo. “Lo que también pasa es que esta situación de pandemia generar un incremento de la demanda por ansiedad”, explicó.
La campaña 2020 tenía un calendario confirmado –los afiliados debían acudir a las farmacias de acuerdo a la terminación de su DNI- tenía previsto finalizar a fines del mes pasado. Pero aun no terminó. Bertelloti dijo que en estos momentos no hay muchas consultas.
¿Hay alguna estimación de cuando estaría finalizada la campaña en Concordia? “No porque no tenemos esas cifras. Eso va a surgir cuando tengamos bien claro el porcentaje de vacunados. Siempre con una salvedad de que una parte se vacunan a través del sistema público. Hay que cruzar datos. Hemos pedido que nos vayan bajando esa información. Sube por el carril de las farmacias a Pami y después hay que entrecruzar con salud pública”, indicó.
El titular del Pami sostuvo que vacunar a toda la población mayor contra la gripe sirve para evitar complicaciones y eventuales internaciones. Por ende, no se satura el sistema hospitalario para un hipotético brote de Covid-19. “Pero yo siempre aclaro aunque parece una verdad de Perogrullo: la vacuna contra la gripe no nos protege contra el coronavirus. Es una enfermedad completamente distinta”, indicó
“Todo lo que es vacunación está bastante centralizado la adquisición de vacunas a nivel nacional. Una parte baja al Pami pero baja a través de las farmacias directamente. Nosotros pedimos la información para saber que farmacias tienen, cuantas dosis. Buscamos la información pero no la manejamos”, dijo Bertelloti.
“Ellos cargan las vacunas a un sistema centralizado”, añadió. “No es información que juntamos nosotros. Viene por otra vía y después la vamos recibiendo”, indicó.
Al mismo tiempo, admitió que a veces los afiliados concurren a la sede de Urquiza y Rawson para vacunarse cuando no lo consiguen en las farmacias. Bertelloti explicó que este año, a diferencia de los anteriores, no hay dosis disponibles en esa sede ni en las agencias. “Se las han utilizado para ir a vacunar a geriátricos o a instituciones de salud mental o a afiliados con internación domiciliaria”, remarcó.