El gremialista dijo que la mitad de los manifestantes que se encuentran en la ruta 14 no son trabajadores. “Son gente que han llevado de los barios periféricos para que los acompañen”, precisó. El resto pertenece a la planta de empleados de los frigoríficos Super y Fepasa.
En referencia a Manuel Paredes, el delegado que fue separado del sindicato, dijo que tiene denuncias penales de parte de un frigorífico y de compañeros de trabajo por amenazas. “Fue separado del sindicato por práctica desleal contra el sindicato. Amenazó a directivos del sindicato, hizo escraches, pintó las paredes e inclusive tirotearon mi casa”, aseguró Vereda.
Consultado sobre la paritaria, otro de los reclamos del grupo de manifestantes, Vereda sostuvo que es llevada adelante por la conducción nacional del sindicato junto con el Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (Cepa). Por lo tanto, el sindicato local no tiene ingerencia “y menos un delegado: no puede ir nunca a hacer un reclamo salarial cuando está negociando la paritaria nacional”, sostuvo Vereda.
La posición del Sindicato de la Carne respecto del corte de ruta es clara: “estamos al margen y apoyamos a la gente que quiere entrar a trabajar y preservar la fuente de trabajo”, dijo Vereda.
“La gente no está de acuerdo con este muchacho Paredes pero esta gente se para en la puerta de los frigoríficos, quema gomas y no deja entrar a trabajar”, indicó. Luego detalló que empleados de los frigoríficos presentaron cerca de 200 denuncias policiales. “A la madrugada, que es la hora de entrar a trabajar, paraban el colectivo, la atacaban, la apretaban, llaman por teléfono y les amenazan la familia. Se está viviendo una situación muy difícil”, explicó.
“Hace varios meses que vienen con paros, movilizaciones y amagues pero se ha complicado en estos últimos meses porque se han concretado las denuncias penales y esto no tiene vuelta atrás, la Justicia va a tener que actuar dentro de muy poquito”, dijo el sindicalista.