“Este es un trabajo por el bien común en el que no nos separaron nuestras diferentes alineaciones partidarias. Tanto el senador Pichetto como yo trabajamos muy fuerte y rápidamente para obtener esta aprobación de la comisión”, destacó Pereyra, gremialista petrolero.
El proyecto establece la rebaja de los combustibles para las provincias de Neuquén y Río Negro, con el propósito es restituir una ventaja histórica que la región perdió en la década del ‘90, cuando al sur del paralelo 42 se pagaba un precio diferencial, mediante un subsidio del Estado Nacional.
En concreto, el proyecto propone que el precio de las naftas en esta región sea un 50 por ciento menor de lo que se cobra en Buenos Aires, ya que actualmente en la Norpatagonia son superiores a los de la zona centro del país, lo que acarrea mayores costos para el turismo y la industria.