El lunes a las ocho de la mañana, cruzó por el piquete a la altura del km 250 de la Autovía que recién comenzaba, rumbo a Capital Federal. Pero, cerca de las 21, cuando retornaba, 100 metros al sur antes del puente previo a la estación de peaje, comenzó a ver camiones y autos estacionados. Según sostuvo, los organizadores del piquete fueron dejando camiones estacionados en la banquina para evitar que los autos crucen por el costado. «Acá el tema es hacer enojar a la gente», dijo. «Había camioneros que no querían que los paren. Empezaron a tocar bocina, era un quilombo», indicó.
Quiso divisar a algun gendarme para decirles que lo que estaban haciendo era incorrecto pero no vio a ninguno. «¿Que hago? Agarro la camioneta y voy por el costado de la banquina, me cruzo para el otro lado donde había visto que tenia un lugarcito para meterme y me meto. Habré pasado diez camiones y vio que había un lugar libre. Si otro hacía la jugada que hice yo de largarte, ellos no te decian nada. ‘Te decían vení por acá y pasas'», dijo. «Yo me largue porque tenia la camioneta. Si vos tenes un auto no pasás. Te comés dos horas de garron ahí», indicó.

Cuando llegó al peaje, se encontró con que le querian cobrar. «Yo tenía una calentura…me bajé y le dije ‘¿Me queres cobrar el peaje todavía que están cortando la ruta ahí atrás?'», señaló. Comenzó a discutir con la empleada, quien solo arguía que la culpa no era de la empresa Caminos del Río Uruguay. «En esto lo llaman al gendarme. Me dice ‘buenas noches ¿que pasa acá?’ y yo le digo ‘lo que pasa es que no estás cumpliendo tu función de gendarme porque ahí atrás están cortando la ruta y vos sos gendarme y eso es un delito federal’. Tenés que ir y ayudar a la gente», indicó Bertoldi.
El comerciante dijo que le asguraban que desconocian la situacion pero era evidente que algo sucedía porque no entraban autos al peaje ni entraba del otro lado. «Ellos sabía lo que estaban pasando», indicó Bertoldi. Después le dijo al encargado del peaje que había gente a la que no dejaban pasar. «Eso es privación de la libertad y es un delito federal», indicó. Luego tuvo otro cruce con el gendarme quien, sostuvo, le dijo que no sabía como iba a pasar en el km 250 porque estaba lleno de vehículos. Bertoldi le respondió que iba a llegar a su casa como sea. «Si yo soy ciudadano de la Republica Argentina», dijo.
Mas adelante, a la altura del km. 250, veia solo un carril ocupado por los camiones, el otro estaba libre. «Había tres o cuatro camionetas con linternas que me pedían que baje la pata porque venía fuerte y cuando llego ahí veía locos pesados que estaban ahí para ver quien se hace el malo. Estaban tomando vino en cajitas», indicó.
El comerciante aseguró haberlo visto al referente de Pro, Eduardo Caminal, en el piquete. Además, dijo que estaban comiendo asado y veía «gente del campo» con boinas y camionetas. Y había una camioneta de Gendarmería «como diciendo ‘impedimos que corten totalmente la ruta’ pero allá atrás que se estaba armando el borbollón…», reflexionó.
En total, supone que no se atrasó mas de una hora en cruzar. «Cuando vi la situacion, me di cuenta lo que estaba pasando y saque la conclusión de que tenia que irme pero la gente que iba quedando ahí no sabía todo esto que yo si sabía», indicó.