El funcionario aseguró que hubo un “exabrupto” por parte de la Cámara al citarlo con plazos tan acotados y argumentó que su ausencia en el recinto, obedece al tratamiento médico de un familiar directo.
El presidente de la Cámara, Jorge Busti, explicó que las citaciones se hicieron bajo la manda constitucional que establece al menos un día de anticipación. “La citación tiene una semana de anticipación”, diferenció Busti pero fue el jefe de la bancada del Peronismo Federal, Horacio Flores (Basavilbaso), quién recogió el guante que lanzó Busti a Federik.
“Los legisladores no tienen ninguna intención de mezclar los problemas de salud del hijo del ministro”, afirmó Flores pero interpretó que el funcionario “incurrió en una contradicción” al no haber manifestado, desde un principio, que había una situación familiar delicada por atender.
“El reconoce que en tres años nunca lo molestamos, entonces, una vez que lo llamamos corresponde que venga. También llamamos a otros ministros”, comparó Flores y recordó que “cuando aún no estaba el Presupuesto, citamos al ministro de Economía, Diego Valiero, que vino y lo escuchamos, más allá de coincidir o no. Pedir situaciones normales es un poco complicado”, dijo y pidió una nueva citación para la primera sesión del año próximo que podría realizarse entre el 21 y 22 de febrero.
