Hugo Moulins comenzó su descargo agradeciendo al gobernador, “por el el gesto de minimizar la importancia al tema”, afirmando que “la verdad, que me sorprendió muchísimo la actitud de mi hijo. Ya que no esta educado de esa manera y no es un chico agresivo”.
Según pudo confirmar DIARIO JUNIO, en el establecimiento educativo no todos condenaron el hecho, y se pudo escuchar a varias personas que llegaron a celebrar el hecho. Incluso cuando Saúl Drí y Víctor Fassi se retiraban del establecimiento, fueron despedidos por unos aplausos en sorna que provenían de una de las aulas.
Ante esto, Moulins expresó que “le aconsejo a los compañeros que no apoyen este tipo de hecho, porque las cosas se arreglan hablando, discutiendo, porque la democracia es así. Nosotros elegimos a nuestros representantes y tenemos que saber respetar las investiduras”.
Consultado por el estado anímico del estudiante de la Escuela de Comercio Nº 2, aseguró que “está quebrado, esta muy arrepentido de lo que hizo. No encuentra consuelo, me prometió que nunca mas iba a ser una cosa de este tipo. Que no entendía como había llegado a cometer este hecho. Yo le dí mi apoyo y le explique que las cosas no funcionan así. Me prometió que iba a reponer su actitud y que no se iba a llevar por lo que le dicen, o por los impulsos”.
En el transcurso del día tomó fuerza la versión de una afrenta que los estudiantes le harían al gobernador, aunque no iba a ser lo que finalmente ocurrió.
Al respecto, Moulins en un primer momento se mostró cauto, explicando que “yo en ese tema no quisiera hablar porque no tengo la seguridad”. Pero inmediatamente agregó que “lo que si sé es que él no era el elegido para esta circunstancia. En un momento de la entrega, fue impulsado a que lo él lo entregara y que tomara determinada actitud, que lo llevó a cometer este hecho, por lo que ahora esta totalmente arrepentido”.
Con respecto a la comunicación mantenida con el gobernador, puntualizó que lo dejó “muy tranquilo, porque entendía que era un hecho que no daba para mayor trascendencia”. Que incluso “habló con las autoridades de la escuela para que no tomen ningún tipo de sanción en contra de mi hijo y me ofreció todo el apoyo psicológico para que no vuelva a ocurrir este tipo de hechos”.
Si bien las autoridades del establecimiento mantienen otra postura, ya que evaluaban “tomar alguno tipo de medida, para que quede claro que no fue un hecho aislado y para que no se vuelva a repetir”.