El municipio pretende que se regularice la situación de terrenos vendidos en las termas

El Concejo Deliberante de Chajarí sancionó ayer una ordenanza por la cual se pretende que los propietarios de parcelas en el complejo termal local regularicen su situación, particularmente desde el punto de vista de que hay muchos en los que no se ha colocado ni un solo ladrillo ni movido un gramo de tierra para comenzar a desarrollar proyectos edilicios. En los “considerandos” de la ordenanza, a la que accedió DIARIO JUNIO, queda en evidencia que “efectuadas tareas de control sobre los predios adjudicados, y su cotejo con los planos originales se constató e identificó diversos incumplimientos en los compromisos asumidos conforme al proyecto original presentado por los adjudicatarios, y su cotejo con la normativa vigente tanto en su diseño como en el comienzo, avance y culminación de obras en lo que a plazos legales condicionantes de la adjudicación refiere”. El tema no es menor, ya que se genera una situación de “extrema desigualdad respecto a los demás adjudicatarios, que sí han cumplido con sus compromisos”.
Es por ello que en la normativa se fijó un plazo de 90 días corridos con la posibilidad de prórroga de 30 días, para que los adjudicatarios que se encuentren en situaciones irregulares respecto al proyecto técnico presentado procedan a regularizar su situación, “dando cumplimiento al mismo, adaptando o modificando los originalmente presentados y otorgarles un plazo perentorio para la continuación, inicio o culminación de las obras según el caso de que se trate”. Asimismo, se efectuará un relevamiento y cotejo de las distintas adjudicaciones de los terrenos efectuados en el Parque Termal de la Ciudad de Chajarí para conocer en detalle como es cada caso. Y transcurrido el plazo mencionado, de no haberse regularizado alguna situación, se labrarán multas.
De acuerdo a lo averiguado por este medio, hay dentro de los casi diez proyectos que aun no han comenzado a desarrollarse, emprendimientos de locales comerciales, un spa y un par de complejos habitacionales. En algunos terrenos solo se han colocado unos cimientos, en otros hay algunas plantas colocadas y otros tienen su obra muy avanzada pero no concluida, exigencia que por ordenanza se impone para normalizar la situación.

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