Por la tarde la municipalidad recibió la confirmación de la disposición que dicta la Conciliación Obligatoria y dispone el inmediato cese de la medida de fuerza, por lo que en el día de hoy esos 25 empleados debieron retornar a la actividad.
Consultado por la situación de ayer, el Intendente Pablo Canali, manifestó “de lamentable la actitud de un grupo minoritario de empleados que pretendió poner en jaque los servicios de la ciudad, lógicamente no logrando el cometido pero generando una situación que nada tiene que ver con la realidad de la ciudad. Quieren las mismas condiciones laborales y salariales de Colón, lo que habría que preguntarse es si todos los empleados quieren eso.”
Por su parte el Presidente del Concejo Deliberante, Carlos Fernández afirmó que “es triste ver como un sector que no representa mas que el 15% de los empleados municipales se arroga la representación de todos, y actúa con semejante irresponsabilidad atentando contra la propiedad municipal y trayendo gente de afuera de la ciudad, en evidente estado de ebriedad y poniendo en peligro la seguridad de la población”
“El Intendente actuó con absoluta responsabilidad al solicitar la conciliación obligatoria, abriendo el diálogo como reclamaban pero en un marco de seguridad pública y sin que haya una patota de Concordia merodeando la Ciudad intimidando a los empleados que querían trabajar”
“No sabemos hasta cuando van a seguir tirando de la soga, porque en un año han recibido 70% de aumento, mas las asignaciones familiares con un 36 % de incremento. En promedio de todas las categorías se aumentó un 58%. La plata no brota del piso, alguien tiene que pagar estos reclamos. Para colmo en la reunión que mantuvo el Intendente con el sindicato la semana pasada, la única idea que plantea esta gente es que se aumenten las tasas un 50%, se controlen las ventas de supermercados y despensas y despidan contratados.”