Con los terrenos, los integrantes del MTL pueden gestionar créditos, en forma coordinada con la Provincia y la Nación, para adquirir los materiales. “La mano de obra sería de Concordia, en principio compañeros del MTL que quieran trabajar y sean desocupados y de otros compañeros que no sean del Movimiento pero que sepan algo de albañilería”, indicó Cabrera. Como ejemplo, mencionó que la cooperativa de viviendas del Movimiento construyó 300 casas en Parque Patricios (Capital Federal). “Hoy está construyendo ocho torres en Lugano”, dijo.
La pretensión del MTL es obtener terreno para las 50 viviendas pero podrían amoldarse al terreno que ceda en comodato el municipio. “Nosotros estamos pidiendo que esto se resuelva en forma urgente”, indicó el coordinador.
La demanda de terrenos es cada vez más importante en la ciudad. En el IAPV esta mañana un empleado comentaba que hay muy pocos terrenos con infraestructura (agua, cloacas, luz) disponible, y los más cercanos, en el barrio Nébel por ejemplo, “valen una fortuna”. Justamente, ese es el mayor problema al momento de proyectar un barrio. “Plata hay, lo que falta son terrenos”, aseguran en el Instituto de Viviendas.
El coordinador aseguró que el sueldo de quienes trabajen en la edificación de las 50 viviendas es costeado por la cooperativa del MTL. “Paga de acuerdo a lo que corresponde de acuerdo al convenio. Además, brinda la posibilidad de formar y capacitar trabajadores de las construcción durante el trabajo pagándoles el sueldo”, expresó.
Por otra parte, los integrantes del MTL demandaron una canasta básica de alimentos que se entregue cada 20 días. Además, señalaron que el Movimiento debe tomar parte de la distribución de los alimentos. Los reclamos se complementan con: vestimenta y “trabajo genuino”.
¿El MTL depende en su totalidad del los recursos que pueda aportarle el Estado? “Nosotros estamos haciendo experiencia a través de la cooperativa de la construcción, de una minera, de una empresa textil que hay en Buenos Aires”, respondió Cabrera. En Concordia, el Movimiento ha conformado cooperativas de trabajo pero no logran ser contratadas por el Estado. “Son las empresas privadas, que tienen trabajadores en negro, las que se benefician”, expresó.
Simultáneamente, Cabrera aseguró que el municipio en ninguna oportunidad los llamó para prestar algún servicio, como a las cooperativas que barren distintas calles de la ciudad. Si eso se revirtiera, el coordinador aseguró que no tendrían inconvenientes de hacerse cargo del Campo del Abasto. “Hay que darle a los movimientos sociales el Campo del Abasto; yo creo que tienen la capacidad de administrar y mejorar todas las condiciones socioambientales de la ciudad”, expresó.
En la actualidad, el MTL administra 100 planes de emergencia ocupacional. Hace algunos años llegó a manejar 800. La disminución de los planes no es una mala noticia, porque la aspiración era poder reinsertarse en el mercado de trabajo a mediano plazo. “La mayoría de ellos, gracias a la formación en cooperativas o capacitación, han podido conseguir trabajo”, dijo Cabrera.
No obstante, el referente aseguró que ahora reclaman la apertura de la inscripción para nuevos planes de emergencia ocupacional. “Cada vez recibo más gente que necesita porque no tiene ningún ingreso”, explicó.
