La responsable institucional del Bachillerato dijo que los empleados encargados de la obra están trabajando: “muy bien, a full, en todo momento y Dios mediante, mañana sábado, a última hora, haremos la evaluación si es que está todo terminado para poder empezar nuevamente las clases a partir del día lunes”.
El director de la Departamental de Escuelas, Saúl Dri, dijo que la reparación del salón “ya terminó” y se está trabajando en el resto de las aulas. “Con la empresa acordamos que tiene que terminar el sábado o el domingo. El lunes tiene que tener luz el resto de la institución”, puntualizó. Además del recambio de cables, el responsable de la Departamental dijo que “hubo que cambiar el tablero porque no tenía la capacidad para el amperaje que necesita la escuela”.
El edificio se encuentra sin luz eléctrica desde el jueves de la semana pasada, pero la obra de reparación comenzó recién el martes al mediodía. El problema es que “saltaban” las llaves térmicas porque había una pérdida o un cortocircuito en algún sector de la instalación. Además, había otro inconveniente en el tablero central del edificio. Los alumnos siguen asistiendo a clases pero sólo en momentos en que la luz solar es lo suficientemente intensa como para iluminar las aulas. El martes pasado, alumnos y docentes protestaron interrumpiendo el tránsito en la esquina de la escuela portando velas encendidas.
Los responsables de la obra de reparación comenzaron a sectorizar la escuela en tres partes –el salón principal, las aulas de adelante y las dependencias del fondo- y cada una tendrá un tablero independiente. Además, a diferencia de antes, podrán utilizarse computadoras, equipos de música y estufas. “Justamente, están trabajando para hacer un buen cableado para que se pueda utilizar todo lo que se necesita”, expresó Benítez.
Padres, docentes y alumnos habían previsto realizar una clase pública esta mañana, a las 9, en la plaza 25 de Mayo. Pero se suspendió por “razones climáticas”. La vice-rectora confirmó que la actividad de protesta se la realizará en el transcurso de la semana que viene. “Igual se la va hacer, eso es lo que decide asamblea porque no solamente son estos reclamos sino otros muchos más”, precisó.
La prioridad entre las exigencias la tiene la construcción del nuevo edificio. El viernes 10 de agosto vendrán funcionarios de Arquitectura desde Paraná para mostrarles los avances del proyecto para que sean aprobados por la comunidad educativa. “En eso estamos, es un pasito más”, dijo Benítez.
Pero todas las expectativas están puestas en la inclusión del proyecto en el presupuesto de la provincia del año próximo. La obra costaría cerca de $ 3.800.000. “Después viene todo el tema de licitación, de pliegos y otros detalles que lleva su tiempo”, expresó. “Nuestra esperanza es que se apruebe en ambas Cámaras”, indicó por último.
