En este marco, reconoció que «las instalaciones de la comuna están tomadas porque arbitrariamente la Justicia Electoral suspendió el llamado a elecciones para que se produzca o no la revocatoria de los mandatos de los vocales».
Criticó la presencia de Carlín «porque la verdad es que no sé para qué vino, debería haberse quedado en Paraná. No sé que hacía el secretario de Gobierno provincial, ya que el conflicto se resuelve por la acción de la Justicia o del pueblo que promueve la revocatoria de los vocales que avanzaron contra el poder del intendente».
Aclaró: «Mi mandato no está cuestionado y la gente reunió firmas para cambiar a los vocales, pero lo que llama la atención es la actitud de los legisladores César Melchiori y Angel Tramontín».
Por ello anunció que seguirá «trabajando por Ibicuy y hasta que el fallo no quede en firme, no permitiré que los vocales usurpen el mandato del pueblo».
Por último entendió que «esta situación surge frente a los intereses que hay detrás de los negocios son muy grandes. Los vocales y los dos legisladores, están muy interesados en sacarme para estar beneficiados en explotaciones turísticas y la apertura del puerto con un casino, incluido».
