Destacó “la gran transformación” que ha logrado Urribarri en Entre Ríos, la que está haciendo conocer en todo el país como lo hizo en esta ocasión en Avellaneda. “El kirchnerismo es una forma gestión, como hace el gobernador, no es un discurso ni tiene que ver con decir sino con hacer las cosas”, dijo el intendente.
El gobernador fue recibido en la sede comunal por el intendente Ferraresi, quien lo acompañó en el acto político y en las recorridas que realizó por las dos universidades de Avellaneda que en su totalidad congregan a más de 11.000 alumnos y dictan más de 30 carreras.
Urribarri estuvo acompañado por los diputados nacionales entrerrianos Lautaro Gervasoni y Carolina Gaillard; el ministro de Cultura y Comunicación, Pedro Báez; el rector de la Universidad Autónoma de Entre Ríos, Aníbal Sattler; y el secretario de Transporte Juan Carlos Chagas. También participaron en el acto concejales de esa comuna bonaerense, funcionarios del municipio, referentes sociales y políticos, militantes y alumnos universitarios.
Tras mantener reuniones con el intendente en la sede comunal y con el rector Jorge Calzoni en la universidad, el gobernador presidió el acto político esa casa de estudios. Luego se trasladó a la UTN donde fue recibido por el rector Jorge Delgener, recorrió las instalaciones de esa universidad, y mantuvo una reunión con docentes y alumnos con quienes intercambió opiniones y respondió a las preguntas formuladas.
Continuidad del proyecto
Urribarri, en tanto, expresó su agradecimiento por la invitación para concurrir a Avellaneda y dijo que este “es un lugar muy caro a los sentimientos de este movimiento nacional y popular”. Expresó sus coincidencias con el intendente Ferraresi, al que llamó “un amigo y compañero”.
“Cuando asumió Néstor Kirchner en 2003 teníamos un país con un tejido social destruido, muy mal con provincias destruidas y el primer acto de gobierno que realizó fue ir a Entre Ríos, la provincia que peor estaba, para solucionar el conflicto con los docentes, a levantar los bonos federales y nos demostró a los entrerrianos y a los argentinos que un amanecer de dignidad era posible”, dijo Urribarri.
Comparó con ejemplos la diferencia que existe hoy con la etapa de 2001 en el país y puntualizó los logros en Entre Ríos que pasó de ser una provincia pastoril marginal, con una economía destruida y gran cantidad de desocupados, a una de las provincias que más crece en el país, con producción agroindustrial con transformación de la materia prima, que tuvo un crecimiento del 48 % de su clase media en seis años, que triplicó las exportaciones, que recuperó la educación técnica y agrotécnica, que construyó 104 escuelas en su gestión, un aula cada dos días, y que aumentó la recaudación cobrándole impuestos a los que más tienen.
Habló de lo sucedido con el gobierno neoliberal de los ’90 pero también los años de la alianza que “ahora reaparece en escena y en nombre de la democracia y del Estado de derecho habían llenado de desocupados, de chicos con hambre y hasta lamentablemente muertos en la Plaza de Mayo en aquellos días de diciembre”.
Recordó el conflicto vivido con la patronales agropecuarias que “se oponían a que aquella superrenta se distribuya en al sociedad”, y que tuvo una importante incidencia en Entre Ríos, y apuntó que pasado ese momento los productores que nada tenían que ver con los reclamos de los terratenientes representados por la Sociedad Rural , como los chacareros, cooperativistas y los pequeños y medianos productores, comenzaron a trabajar con el gobierno “para ir construyendo la burguesía agropecuaria que necesita este proyecto nacional, popular y democrático, como la tuvo Perón en su momento. No es pelearse con todos, sino elegir con quien trabajar para hacer más grande este país”, remarcó el gobernador.
Luego indicó: “Yo soy hombre incondicional de este proyecto, estuve en las buenas y en las malas, en las duras y las más duras, como dice nuestra Presidenta. Van a pasar muchas décadas para que haya un proyecto tan transformador e igualador como este, con políticas de Estado que no tienen antecedentes en cincuenta años y que son los trazos orientadores que devolvió los derechos sociales y laborales a los argentinos”.
Finalmente, Urribarri expresó: “Así como hace 11 años, luego de la pesadilla neoliberal, vino un reparador de sueños a devolverle la esperanza a los argentinos, yo quiero humildemente venir a proponerles un sueño que es abrazar a nuestra Presidenta y, a través de ese abrazo, abrazar a todos los argentinos para que unidos, solidarios e inteligentes le demostremos al país y al mundo que esta Argentina de para mucho más”.
