Anteriormente las facturas eran por importes como $ 7.600 u $ 8.800. “De todas maneras, por más que estemos en verano y que se ocupen los ventiladores, me parecen bastante altos los montos que vienen”, sostuvo.
En el Hogar no hay equipos de aire acondicionado, solamente ventiladores. “Con estos calores terribles los ventiladores se ocupan permanentemente, aparte no nos olvidemos que son personas ya mayores de edad que tienen que estar hidratados y en lugares frescos”, dijo. En consecuencia, no se pueden apagar los ventiladores. “Se ahorra hasta donde se puede. Lo que queremos es el bienestar de cada uno de ellos y jamás se les sacaría los ventiladores”, indicó.
La queja de la empleada tiene que ver con que no se tiene en cuenta que se trata de una institución de salud que brinda su servicio a personas mayores de edad que no pueden estar en otro lado. “No se puede hacer nada porque por más reclamos que se hagan, no los tienen en cuenta”, indicó.
Además, hay 40 residentes adultos mayores, pero no todos tienen ventilador. Y aquel que no lo tiene se le consigue para que lo tenga porque tienen que estar en lugares frescos y tomar mucha agua. Acá sí o sí hay que pensar constantemente en ellos y que estén bien”, recalcó.
Actualmente desde el Hogar adeudan desde marzo del año pasado más de $ 80.000 a la CEC (Cooperativa Eléctrica de Concordia). “Se está tratando de hacer un arreglo con la gente de Paraná para que se deposite ese dinero y así cubrir el presupuesto de la luz para quedar al día porque la verdad es que es imposible pagar con el depósito para servicios que tenemos que son $ 16.500”, mensuales.
Con $ 16.500, deben afrontar el pago de una factura de luz de $ 10.600 y el médico les cuesta $ 4.500 por mes. “Pagando el médico y la luz, las demás cosas ya no se pueden pagar”, expresó. La otra partida, denominada ‘para consumo’ y destinada a la compra de alimentos, tampoco les alcanza. Por eso estaban analizando la posibilidad de reclamar un incremento de partidas.
No obstante, aclaró que la CEC no cortó el suministro eléctrico. “Eso me llamó la atención porque antes venían los cortes de luz y este año aún no ha pasado eso”, manifestó.
Algo similar les sucede con el gas natural. En verano no se ocupan los calefactores por eso las facturas son de importes menos onerosos que a mitad de año. “En una oportunidad en que no me habían depositado las partidas porque enero, febrero y marzo no hay depósitos de partidas, llamé a Gas Nea para decir si no podían esperar hasta que me depositaran para hacer el pago y me dijeron que no”, indicó. “En el Hogar es indispensable que tengan gas porque si no ¿Qué comen los ancianos?”, se preguntó. Para salir de esa situación, los empleados decidieron pagar con dinero de sus sueldos la factura de gas hasta que les reintegren. “Así el gas no lo cortan”, señaló.
Vale destacar que esta afirmaciòn fue desmentida por el titular del asilo, Diego Miño que (aunque de vacaciones) llamó al diario para desmentir tales dichos y aclarando que desde el gobierno nunca permitieron que faltara nada en esa institución.