“La privación de lo necesario para vivir humilla al hombre; es un drama ante el cuál la conciencia de quién tiene la posibilidad de intervenir no puede permanecer indiferente” San Juan Pablo II.
El hambre de los nadie es una triste realidad que interpela (o debería) a más de uno. Ellos carecen de muchas cosas, pero fundamentalmente de la dignidad del estómago pues no comen donde quieren, no comen con quienes quieren, no comen como quieren, comen como pueden, comen lo que pueden y algunos casi no comen.
Según el informe del INDEC “Incidencia de la pobreza y la indigencia en 31 aglomerados urbanos”, en el primer semestre de 2019 el porcentaje de hogares por debajo de la línea de pobreza es del 25,4%; estos comprenden el 35,4% de las personas. Dentro de este conjunto se distingue un 5,5% de hogares indigentes, que incluyen el 7,7% de las personas. Los indicadores mencionados registran una suba de la pobreza y la indigencia con respecto al segundo semestre de 2018 y también respecto de los consignados en el primer semestre de 2018. El 40% de los niños que se alimentan en comedores comunitarios sufren de malnutrición. Los resultados provienen de la información de la Encuesta Permanente de Hogares y la valorización de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total. Estamos hablando de casi 16 millones de argentinos.
“Al pobre no basta con definirlo, hay que tocarlo, hay que sentir su piel” José María Castiñeira de Dios. Como Gobernar es Incluir y en el tiempo que viene a la economía hay que darle alma, verla con rostro humano, que tenga en el centro a la persona, con valores y que alimente no sólo el alma de algunos sino el estómago de todos, el 11 de diciembre Alberto Fernández pondrá en funciones el Consejo Federal Argentina Contra el Hambre que monitoreará el “Plan Argentina contra el Hambre”, una decisión política vinculada con acciones concretas en relación a la canasta básica de alimentos y a los problemas de malnutrición, previendo también la creación de un Programa Nacional de Seguridad Alimentaria y un Fondo Federal de Alimentación y Nutrición.
El hambre de los nadie ya será una tarea de todos a partir del 10 de diciembre, viene un tiempo en que el diálogo y el encuentro deben estar por sobre las diferencias sin sentido para combatir el hambre en Argentina de una vez por todas y hacer una sociedad más justa y solidaria, pues nadie puede realizarse en una comunidad que no se realiza. Porque la Patria es un Don y la Nación una Tarea, re-organizar la comunidad es la clave.