El economista del Plan Fénix fue consultado respecto de la actualidad económica que vive la Argentina.
En diálogo con Luciano Galende y Néstor Restivo, Ferrer recordó que “la percepción de la falta de dólares es un viejo problema de la economía argentina”.
Sostuvo que “la única respuesta es tratar de ordenar las variables y transmitir señales muy claras de que se va a consolidar la situación fiscal, se va a hacer un esfuerzo para ganar dólares genuinos y para recuperar los dólares que están fuera del circuito económico”
Sentenció que acá “no hay una sola medida que pueda solucionar el problema sino que se trata de un conjunto de acciones”.
Si bien reconoció que la Argentina hoy sufre la inflación o la existencia de un mercado de divisas ilegal, descartó de plano que esas variables económicas puedan desembocar en un desorden mayúscuclo como pasó en 1983 o en 2001.
En este sentido recordó que “el Estado está cumpliendo con sus compromisos, el sistema bancario esta sólido, y hay una base de sostenimiento de la situación que no nos permite pensar en un problema mayor, pero el tema hay que solucionarlo”.
Por otra parte Ferrer fue consultado sobre la conducta de los empresarios en todo este contexto.
Analizó que “cualquier empresario como tal busca ganar dinero y preservar el valor de sus activos y cuando se percibe que hay posibilidades de especular se especula y cuando hay condiciones para producir se produce”.
“Cada sociedad tiene el empresario que se merece en virtud del conjunto de circunstancias que vive esa sociedad y en el caso argentino hemos vivido mucho tiempo en la inestabilidad los cambios de política las devaluaciones brusca y la la hiperinflación y ese ha sido un escenario negativo para la formación de un empresariado nacional pujante”
Ferrer sentenció que hay que darle lugar a los empresarios “si se gana plata especulando van a especular y si se gana plata produciendo van a producir”, y la diferencia está en la dimensión humana de cada uno.
En este contexto concluyó que “el Gobierno Nacional no tiene herramientas para reactivar la economía porque no puede expandir el gasto por la situación de la inflación y de la falta de divisas”.
Pero sentenció que “sí tiene las herramientas para ir ordenando las variables básicas y dar señales de que la casa está en orden, de que se está en un sendero de ordenamiento que no tiene nada que ver con el ajuste ortodoxo”.