LAER viene de un cambio de timón: la remoción del abogado Juan José Canosa de la intervención y su reemplazo por el piloto Gualberto Salcerini. La salida de Canosa de la aerolínea se produjo luego del fracaso de las gestiones por retomar los vuelos mediante un acuerdo con la firma Regional Argentina, que había recibido cuestionamientos desde la Fiscalía de Estado.
Al irse, Canosa destacó los logros de su gestión, y entre éstos sostuvo que “se logró sacar la ley que transfería los empleados a la provincia, para preservar la fuente de ello, con lo cual estamos muy conformes. El Fokker fue desafectado de LAER y vendido a la Fuerza Aérea a través del Gobierno de Entre Ríos. Se hicieron todos los trámites ante la Secretaría de Transporte de la Nación, se presentaron los balances que había que hacer. Se dejaron sin efecto dos trámites de caducidad de las habilitaciones que tenía la empresa. La deuda de 34 millones se bajó a 23 millones”.
“Lo único que nos faltó es hacer tratar de volar la Línea”, afirmó.
Cabe recordar que la Línea Aérea entrerriana y Regional Argentina, la empresa que explotaba las rutas pertenecientes a LAER, acordaron desvincularse de mutuo acuerdo en octubre del año pasado, luego de que la firma cubriera vuelos a Buenos Aires de manera irregular por espacio de cinco meses.
De todos modos, el ahora ex interventor afirmó que hacer volar la línea “no era el objetivo de la intervención; el objetivo era resolver todos los problemas que tenía la empresa, que eran muy graves”.
Asimismo, justificó el fracaso en ese intento aduciendo que “las alternativas y el mercado no dan para otra cosa que lo que se intentó hacer. Los números de la operación marcan que Entre Ríos es un mercado muy difícil, más allá de la complejidad de la situación aerocomercial en Argentina y el mundo”.