El delegado sostuvo que se acercaron a la empresa donde fueron atendidos por los empleados. “Fuimos a decirles cuales eran los medios para garantizarles sus indemnizaciones. Nos dijeron que ellos estuvieron trabajando codo a codo con el empleador para poder mantener los puestos de trabajo y el emprendimiento”, dijo Delgado.
Pero la energía eléctrica volvió a ser un escollo insalvable para la continuidad del negocio. “Estaba pagando un monto de $ 45.000, $ 50.000 mensuales. Hicieron un plan con la Cooperativa para pagar cada 48 horas. Lamentablemente no generaban tantas ventas para cumplir con todas las obligaciones y quedaron con el tendal de deudas”, indicó.
Desde el ministerio de Trabajo los asesoraron a los cinco trabajadores, de entre uno y cuatro años de antigüedad en el comercio, para reclamar las indemnizaciones, pero no se pusieron de acuerdo. Aparentemente hay una posibilidad de reabrir, mediante un crédito que recibiría el propietario, para el 10 de octubre. “Están viendo de qué manera lo van a hacer. Lo que no quieren es perder los puestos de trabajo y que no se pierda el ingreso”, dijo.
Algo similar le sucedió a la carnicería de la misma marca ubicada por avenida San Lorenzo. Abrió y pudo trabajar solo seis meses. A fines de junio pasado cerró. “La situación fue la misma. El costo de la energía fue lo que terminó capotando el proyecto de esa gente”, dijo.
En una situación aparte colocó al supermercado Día % en calle San Juan. Hace algunos meses, desde la cadena de origen español habían manifestado que debían reducir el costo de los contratos laborales. Una propuesta era bajar de jornada completa a la mitad. La otra era indemnizar con el 100 % a quienes no estuviesen de acuerdo. “Lamentablemente después Día % no pudo cumplir las metas de ventas”, indicó.
En consecuencia, lo concedieron bajo la figura de franquicia a un empresario de Federación. De los nueve empleados: dos fueron despedidos porque tenían la antigüedad máxima y recibieron el 100 % de la indemnización, cuatro fueron reincorporados por la franquicia (que as u vez trajo a tres empleados nuevos) aunque fueron indemnizados por su antigüedad para comenzar de cero, y los otros tres fueron derivados a las otras sucursales.
Delgado señaló que los empleados de la estación de servicios ubicada en San Lorenzo y Laprida ya acordaron sus indemnizaciones porque ya preveían que se aproximaba el cierre definitivo. “No tuvimos ningún tipo de reclamos por parte de los trabajadores en ningún momento”, dijo. de la misma forma, explicó que se debió al aumento de los costos fijos.
El delegado de Trabajo dijo que es lamentable también para los emprendedores que quieren generar producción y empleo debido a que predomina la timba financiera. “No puede un emprendedor de una pequeña y mediana empresa sobrellevar la situación con los costos que existen. Se tienen que achicar y muchas veces terminan pagando los trabajadores y el empresario se ve apretado y termina negociando con los trabajadores una nueva firma de contratación laboral o despidiéndolos lamentablemente”, sostuvo.
“Es una situación muy difícil, muy complicada, tanto para las pequeñas y medianas empresas como para los trabajadores. No hay garantías de que esto mejore si siguen estas políticas económicas que se están dando. Nosotros antes combinábamos muchas veces con el ministerio de Trabajo de la Nación las situaciones preventivas de crisis con el Repro, unas partidas para afrontar estas situaciones de evitar cierres y despidos pero al pasar al rango de secretaría no sabemos en qué rango van a quedar y si van a contar con el mismo presupuesto y las mismas partidas para solventar esta crisis”, dijo por último Delgado.