El jefe de Gabinete Alberto Fernández salió a respaldar hoy a la Secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti y afirmó que esas acusaciones son parte de “una operación política” que se inició a partir de una carpeta un “calumniador” hizo circular “por diferentes despachos y medios”.
En conferencia de prensa junto a la funcionaria, Fernández justificó la contratación de 306 personas en la necesidad de fortalecer institucionalmente la secretaría tras el traspaso a la órbita de la jefatura de Gabinete.
“En primer lugar, desde que nos hicimos cargo de la Secretaría tuvimos que llevar adelante una tarea de fortalecimiento institucional grande. En realidad cuando llegamos a la secretaría esta era absolutamente ajena a los problemas que a partir de nuestra gestión hemos convertido en temas centrales. En primer lugar el conflicto de las papeleras que nos ha exigido muchísimo”, dijo.
“Para poder hacernos cargo de la gestión de las papeleras, el plan de saneamiento del riachuelo y llevar control actividad minera era imposible desarrollarlo con el cuerpo que teníamos de agentes”, agregó para afirmar luego que esas contrataciones fueron “avaladas por la Auditoría General de la Nación. Esa Secretaría había dejado de inspeccionar, de controlar y se había vuelto cómplice de los agresores del medio ambiente, de las empresas que contaminan y para quienes el cuidado del medio ambiente es un costo», sostuvo Fernández.
Por otra parte, Fernández negó que la secretaría pagara sueldo alguno de “12 mil o 30 mil pesos como temerariamente informó el periodista” y afirmó que existe sólo una familiar de Romina Picolotti –una prima hermana- entre los contratados.
Además, afirmó que el “25 por ciento tiene estudios de posgrado” y “ninguno de los agente que han sido contratados, lo han sido por otra causa que no sean la idoneidad y la dedicación”, dijo.
Para Fernández, “lo que el autodenominado periodista de investigación ha hecho es copiar esa carpeta que andaba circulando en otros despachos” y que él mismo ya conocía porque era la misma que “muchos de nosotros, habían recibido aproximadamente 60 días antes. Y que era una operación para lastimar a una funcionaria convocada por el gobierno y que es una militante activa de los derechos humanos y la defensa del medioambiente que dejo el rol tranquilo que el trabajo en esas organizaciones ambientales tienen, para hacerse cargo de una secretaría compleja en un momento muy particular”, concluyó.
Según la investigación de Clarín, en el año de gestión de Picolotti en Medio Ambiente, la secretaría casi duplicó la planta de empleados, contratando unas 350 personas. Entre el nuevo personal figuran familiares cercanos y amigos de la funcionaria. Como su hermano, Juan, quien a su vez llevó a su novia y a su cuñado. Los salarios van desde los 4 mil a los 12 mil pesos.
También se detectaron frecuentes viajes en jets privados, costosos como todo servicio de lujo, y compras millonarias de muebles y computadoras. Se constató que Picolotti canalizaba los pagos a través de la fundación ArgenINTA, luego de desviar hacia allí fondos públicos del presupuesto. Esa plata no debía pasar por los controles habituales.