«Muchas de las propuestas que nos llegan deben verse desde la perspectiva de la demanda de un gobierno ante el resto de la sociedad. Si estamos dispuestos a bajar retenciones hay que decir sobre que sector se ajusta. Hoy no estamos dispuesto a no dar aumento a maestros, jubilaciones, obra publica nacional y planes sociales», argumento el funcionario nacional.
Asimismo, en el prologo a su exposición insistió en pedir prudencia ante el complejo escenario internacional para «mantener el nivel de actividad y de empleo de todos los sectores». Luego, fue Giorgi quien anuncio una serie de medidas que tendrán un costo fiscal de $1300 millones para el Gobierno. Entre ellos, la baja en las retenciones lácteas, a las economías regionales, subsidios a las carnes, 230 millones para subsidios en zonas afectadas por la sequía y ampliación de los subsidios al gasoil.
En relación al tema de las retenciones a la soja, Randazzo afirmó que «hoy hay 9 millones de toneladas de soja sin vender cuando hay una gran recesión por la falta de mercado. Sería injusto para el resto de los actores de la economía que propiciemos una baja en la soja en desmedro de otros actores de la economía que necesitan recursos».
El ministro aseveró que «no es un problema de capricho, ni es un tabú, estamos dispuestos a discutirlo de acuerdo a las necesidades que tiene la Argentina».