Ayer, se hizo muy difícil obtener el combustible en la ciudad. Las siete estaciones –contando las del ejido urbano mas las que están sobre ruta 14, propiedad de empresarios locales- carecían de gasoil. Carteles de “no hay gasoil”, mangueras cruzadas por encima de los surtidores o conitos de distribución de transito colocados frente a las maquinas expendedoras, reflejaban un panorama que hasta ahora no se había visto en tal magnitud. Incluso una de las estaciones del centro, que generalmente cuenta con el combustible todos los días (pero que lo vende a 1,90), tampoco tenía. Sobre las primeras horas de la tarde, al llegar de los camiones abastecedores, un grueso numero de vehículos –mayormente camiones- se agolparon formando colas de hasta dos cuadras en algunos casos.
La falta del elemento se hizo notoria en los últimos días, y como uno de los tantos afectados mas por la escasez del mismo, en las empresas que prestan servicios de remis, las cuales, en ciertas oportunidades, no pueden contar con la totalidad de su flota de moviles, ya que auto que se quedaba sin gasoil era prácticamente auto que dejaba el servicio, ante la dificultad de conseguirlo.
