1) En la necesidad advertir y hacer pública la preocupación que existe en las localidades donde gobierna el justicialismo ante evidentes posiciones de sus autoridades políticas que denotan situaciones que rozan la necesaria convivencia en democracia. La soberbia e intransigencia, evidenciadas a diario, en nada ayuda a construir una sociedad plural. Se patotea, se discrimina, no dejan entrar a concejales en lugares que deben ser públicos, no se contestan los pedidos de informe, no se participa, no se aclara. Este comportamiento tiene un denominador común: la arrogancia; en una lógica similar de ejercer el poder como copia fiel del gobierno de los Kirchner.
2) Con relación al trabajo del foro continuaran propiciando el estudio y análisis de problemáticas comunes que serán plasmadas en documentos de trabajo y propuestas de normativas, algunas ya elaboradas, y puestas a consideración de las autoridades políticas en particular y la ciudadanía en general.
3) En propiciar el diálogo y sentido común como único marco posible en el gobierno de nuestras comunas.
4) Señalar las consecuencias que tendrán para los gobiernos municipales, en el mediano plazo, el sostenido crecimiento de la “inflación” como emergente de una economía inestable y clara señal de un modelo agotado. Las últimas propuestas del ministro de economía Lousteau, echado luego por Cristina, evidencian por un lado la gravedad de la situación y lo que es más delicado, por otro: la pobreza total de este gobierno en ese sentido. Es necesario reordenar algunos aspectos de la economía. Esto es comprendido y compartido por todos; pero es impensado que se pueda realizar sin un programa a mediano plazo. El cambio propuesto nada cambia.
5) Mostrar preocupación por los índices de crecimiento en el “gasto público” y en este rubro los montos destinados a personal, contratos y pagos de servicios por resolución. Sostenidos por aumentos en tasas, solo contribuyen al incremento de la ya alta “presión impositiva”. Ahogan las economías locales, e indirectamente, en el mediano plazo verán como se afectan las propias finanzas municipales. El horizonte, pese a la escasa información que nos brindan sobre el desenvolvimiento del gasto, es oscuro y prevemos en mediano plazo estrechez financiera que afectará la normal prestación de los servicios.
6) Requerir de los municipales en manos del justicialismo una clara definición en defensa a los intereses de nuestra región, en una perspectiva federal que precisamente no caracteriza al matrimonio presidencial.
