ARGENTINA Y BRASIL
El documento, que se dio a conocer esta mañana en Washington, pinta un panorama más sombrío para América latina, que atribuye, entre otras razones, "a la menor expectativa de recuperación a corto plazo" en las economías de nuestro país y de Brasil.
El informe, evaluado por la entidad que lidera Christine Lagarde, señala una actividad "más débil de lo esperado" en algunos países que "atraviesan recesión" y cita entre ellos a la Argentina y a Brasil.
EL MUNDO
En términos globales, el FMI mantuvo en 3,4 y 3,6 por ciento la expectativa de crecimiento global para 2017 y 2018, pero en las perspectivas por regiones hizo revisiones al alza para las economías avanzadas y a la baja para las emergentes.
El organismo proyectó que las economías avanzadas crecerán 1,9 y 2 por ciento en 2017 y 2018, respectivamente, lo que equivale a una diferencia de 0,1 y 0,2 puntos porcentuales más que en la proyección anterior. Para América Latina y Caribe bajó en 0,4 puntos porcentuales la proyección para 2017 hasta 1,2 por ciento y mantuvo la expectativa para 2018 en 2,1 por ciento.
"En América Latina, la revisión a la baja del crecimiento refleja en gran medida una menor expectativa de recuperación a corto plazo en Argentina y Brasil tras cifras de crecimiento que defraudaron las expectativas en torno al segundo semestre de 2016, condiciones financieras más restrictivas y vientos en contra más fuertes para México debido a la incertidumbre relacionada con Estados Unidos, así como el deterioro ininterrumpido de la situación en Venezuela", sostiene el Fondo.