Como se recordará la remisera Marta Cabral y el sargento de policía Pablo Barreto, fueron asesinados a quemaropa por disparos de arma de fuego en la cabeza. Sotelo fue el único imputado en la causa y era un ex policia, que había ingresado al cuerpo policial con un título secundario apócrifo. El Tribunal decidió, por voto unánime, condenarlo a prisión perpetua e inhabilitación absoluta perpetua por el hecho calificado como Homicidio Simple y Homicidio doblemente Calificado.
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El pasado 9 de septiembre de 2009 DIARIOJUNIO publicaba este reportaje…
El comisario José Luis Jaluf, director de la Escuela de Policía de Villaguay (donde curso Sotelo), recuerda al agente acusado del doble homicidio, David Sotelo. “Era un chico sumamente te diría vergonzoso, introvertido y nosotros le pedíamos que incentive más sus ganas”, manifesto Jaluf a DIARIOJUNIO. Sotelo estuvo cuatro meses y medio. Ingresó en 2007 y egresó en febrero de 2008 como agente de Policía. Jaluf reivindicó la formación que se les brinda a los aspirantes y separó a la escuela de lo sucedido. “No se olviden que somos 10.000 policías y éste caso es aislado”. Por ello, situó al hecho en un plano personal. “Esto es un desprendimiento de algo que le ocurrió a esta muchacho. Me gustaría preguntarle que es lo que le ocurrió”, dijo el comisario.