Foto: Santiago David
Por Fernando Belottini
La obra hace una relectura y adaptación del cuento clásico de la literatura gótica “El corazón delator” de Edgard Allan Poe y está ambientada en una especie de celda o dormitorio de lo que parece una institución psiquiátrica.
Entre desvaríos poéticos que piden lucidez, la protagonista se presta a contarnos una historia que la tuvo como víctima y victimaria. Víctima por el abandono por parte de su madre a los once años y puesta al servicio doméstico de un hombre solitario y pudiente, victimaria en tanto lo asesina.
En estos tópicos la relectura resuelve algunas ambigüedades del cuento de Poe, como son la relación entre el narrador y el anciano, su aquí y ahora y destino final. Hay un trabajo de evolución del personaje muy propio de la dramaturgia que el género originario quizás no demande.
La protagonista, pasa de intentar demostrar su cordura a asumir de cuerpo entero una culpa que no le dio ni le dará respiro.
Rosario Correa despliega una actuación sin fisuras, manejando los recursos actorales (voz, expresión corporal, inmersión en el personaje) de manera notable y nos hace pensar en la heroicidad de los unipersonales, donde rodeada de ojos críticos, como aquel que tanto perturba a Sara-Ramona, se pone al hombro la truculencia de un relato tal vez demasiado respetuoso del lenguaje (traducido) de época, pero que no quita mérito al despliegue que realiza.
Con la calidad de estas propuestas, al que suman eficacia los demás detalles técnicos como instalaciones, música e iluminación, los elencos concordienses vienen demostrando un compromiso con el teatro que un público nuevo está reconociendo y retribuyendo con su presencia.
Al abandonar la sala, “Cuando el mundo entero dormía” resuena en nosotros como la pasión que la anima.
Concordia, 13/11/2022
Ficha técnica:
Idea y actuación: Rosario Correa
Adaptación y dramaturgia: Patricia Velzi y Rosario Correa
Dirección: Patricia Velzi
Asistencia general: Sergio Calvo
Música original: Diego Perichón y Guillermo Russo
Entrenamiento vocal: Lucas Salvarrey
Diseño de vestuario y escenografía: Julia Ruedas
Realización: Julia Ruedas y El grupo
Diseño de luces: Patricia Velzi
Fotos: Santiago David
Operación técnica: Sergio Calvo y Patricia Velzi
Producción general: El grupo
