El entrerriano Federico Prieto fue designado este miércoles 4 de mayo como Secretario de Gestión Cultural del Ministerio de Cultura de la Nación. Así, será uno de los cuatro secretarios que dependerán directamente del ministro y secundará a Bauer en la toma de decisiones a nivel nacional.
El entrerriano asume en Nación tras el pedido de renuncia de Bauer al anterior secretario. Según supo este medio, la renuncia se dio en medio de denuncias por maltrato laboral. Según publicó La Política On Line, el antecesor de Prieto – Maximiliano Uceda- renunció a su cargo “por la interna”. Uceda es hermano de la diputada mendocina Marisa Uceda y ambos son cercanos a la senadora Anabel Fernández Sagasti, de máxima confianza de la vicepresidenta Cristina Fernández. Dice el portal que Prieto llega a Cultura de la mano del gobernador Bordet, “uno de los más leales a Alberto Fernández”.
La publicación en el Boletín Oficial de la designación de Prieto
Fue el propio Bauer quien contactó a Prieto para ofrecerle el cargo y el nombre del entrerriano ya fue presentado a diferentes Direcciones del Ministerio que recibieron con aceptación la novedad, por su trayectoria en la provincia y por el respeto que por él mostró el propio ministro.
Prieto tiene 36 años y es gestor cultural. Tras una carrera en diversas áreas de Cultura en el estado provincial asumió en el segundo mandato de Gustavo Bordet como director de Formación y Diversidad Cultural de la secretaría de Cultura.
Líneas de gestión
“Bauer me encomendó el federalismo y el territorio y a mi juego me llamaron porque vengo trabajando en eso desde hace mucho tiempo. En cultura comunitaria y con las bibliotecas populares” contó esta mañana Prieto en comunicación por la radio pública de Concordia.
“Tenemos como objetivo la federalización real de la cultura y eso significa acompañar los procesos culturales en todas las provincias, trabajando con los organismo provinciales” agregó y detalló que “el sector independiente es gigante y dinamizan el proceso cultural. Federalizar la cultura significa lograr transferencia de recursos directos a organizaciones, colectivos”.
Matriz de identidad a las fiestas populares
Sobre aspectos puntuales de la tarea, el flamante funcionario nacional precisó que uno de sus objetivos es “darle una matriz de identidad a las fiestas populares” y puso como ejemplo la Fiesta de la Citricultura de Concordia.
“Que no sea solamente una puesta en escena de shows artísticos, sino que se pueda también celebrar el bien o servicio cultural, en este caso la producción citrícola en la región” dijo.
“Si celebras un bien o servicio cultural, ¿qué pasa con la producción? ¿Cuál es el imaginario sobre la naranja, la mandarina, el limón? Ese espíritu hay que problematizar, que tenga relación con lo que nos rodea, porque sino consumismo producciones culturales foráneas que lo que intentan es colonizar nuestras mentes y eso no está en coherencia con el espacio que nos rodea” concluyó.