La ordenanza está compuesta por 5 artículos. El art. 2° establece que la misión de la Secretaría será: “entender en la diagramación y recomendación de las modificaciones, actualizaciones o transformaciones que sean pertinentes para la modernización o el mejor funcionamiento de la corporación municipal, etc., etc., etc.”
La secretaría se dividirá en dos direcciones: la Dirección de Estudios, Proyectos y Perfeccionamiento de la Gestión Municipal y la Dirección de Controles Internos.
La primera dirección deberá “elaborar proyectos y programas destinados a la optimización y/o modernización de estructura, normas y sistemas relativos al orden administrativo, patrimonial y financiero”, entre otras funciones.
En cambio, la Dirección de Controles Internos deberá “efectuar los controles que disponga el Dpto. Ejecutivo en el orden presupuestario, contable, económico, financiero y de gestión, así como el cumplimiento de las normas de aplicación”.
Entre las modificaciones realizadas al proyecto original, se destaca que los controles deberán contar con una “autorización previa” del departamento Ejecutivo. En cambio, originalmente se preveía que la secretaria podía constituirse en cualquier dependencia municipal en forma “sorpresiva”. Una fuente muy cercana al tema aseguraba que, de esa forma, se evitaba que los secretarios sepan de antemano que día se los iba a inspeccionar.
Otro cambio al proyecto destaca que los superiores jerárquicos “deberán brindar la colaboración necesaria a los fines dispuestos”. En cambio, el proyecto original disponía que los superiores “no podrán interponer razón alguna para negarse a proveer la documentación…bajo apercibimiento de ser sancionados por el Departamento Ejecutivo Municipal”.
Más gastos y burocracia
El concejal Marcos Wdowiak (Todo por Concordia) dejó en claro su postura negativa al proyecto. El edil apuntó a los compromisos suscriptos en campaña por el actual intendente. “Cresto iba a reducir de siete a cuatro las secretarías a los efectos de economizar el presupuesto destinado a personal. Creo que los compromisos que se asumen en campaña tienen que ser cumplidos. Caso contrario es una traición a quienes confiaron en la persona que votaron”, expresó.
Wdowiak, además, manifestó su convencimiento que, antes de crear una Secretaría con una estructura de 12 personas, lo mejor es fundar un área de Control de Gestión, con una planta “mucho más reducida, un jefe y dos empleados”.
“Estoy seguro que la creación de esta secretaría, con sus dos direcciones, va a representar un gasto enorme para el erario público que podría estar destinado a cuestiones mucho más importantes”, acotó el concejal, cuando finalizaba su intervención.
El concejal Jorge Ferrera (PJ) argumentó en el recinto que el proyecto era beneficioso para mejorar la eficiencia de la burocracia municipal. Por otra parte, argumentó que no era intención del Concejo crear una fiscalía de “carácter policíaco”.
Por su parte, Gladis Tribulatti (Nuevo Espacio), votó en contra de la iniciativa porque consideró que se va a “aumentar la burocracia municipal”.
Además, indicó que “estos controles están exclusivamente dirigidos a controlar el funcionamiento de las cuatro secretarías que hay. Esta información sólo le sería beneficiosa al señor intendente. Ninguno de nosotros va a tener acceso a la información”. Tribulatti contrastó esa circunstancia con el accionar de la Comisión de Control de Ejecución del Gasto -impulsada por el ex-intendente Orduna y derogada por Cresto-, al señalar que la información recolectada por esa Comisión sí pasaba por mano de los concejales.