Garay, que cuando era presidente de la institución renunció al cargo por asumir como concejal electo en el comienzo de la gestión del ingeniero García, expresó que asume el cargo al mismo tiempo que ejerce como edil porque “en ese momento (2003) se venía el voto de una ordenanza para saber si se accedía o no a la organización de los carnavales por parte de Bomberos”. “Yo podía haberme planteado en ese momento no votar, levantarme y abstenerme de hacerlo. Pero no es mi forma de hacer las cosas”, dijo, a la par que sostuvo que “me queda poco tiempo como concejal”.
Al mismo tiempo, el dirigente destacó la presencia en la nueva Comisión Directiva de “gente que nunca se había acercado a la institución” y aseguró que uno de sus primeros objetivos es saldar la deuda que Bomberos tiene con SADAIC (mas de 50 mil pesos en concepto de pago por derechos de autor de piezas musicales interpretadas en 2002 en los carnavales), hecho que ya estaría en vías de negociación y consecuente resolución.
“Creo que hoy por hoy las cosas han cambiado y la sociedad en general empieza a entender esto que estaba roto que es el tejido social, y la Asociación de Bomberos es parte de esta sociedad y el Estado es parte también y por eso no es un pecado estar trabajando en uno y en otro. Esto hay que hacerlo a entender a todos los que todavía no lo entendieron”, puntualizó finalmente.